El campo de San Mamés se iluminaba al acabar la final de la Supercopa de España vencida por el Athletic Club al FC Barcelona en La Cartuja de Sevilla por 2-3 en la prórroga. Un triunfo excepcional, con un entrenador, Marcelino, que llevaba 10 días en Bilbao y que ha sido capaz de derrotar a los de Leo Messi y al Real Madrid en apenas 4 días.
Un éxito que ratifica la puesta por la Filosofía y demuestra que se puede y que los chavales jóvenes pueden celebrar títulos como este o el de 2015. El Athletic ya tiene 3 supercopas mientras mira de reojo a la final de la Copa del Rey a jugar ante la Real Sociedad.
No hubo público en la final pero los aplausos y gritos que se oyeron en los balcones certifican que Bilbao necesitaba una alegría y noticias positivas en esta dura pandemia. Ya se ha dado un primer paso, toda una vacuna.