Enfrentarse al Atlético de Madrid del 'Cholo' Simeone es algo que le motiva sobremanera al míster de Careñes. Victoria de calidad. Partido preparado con mimo en Lezama. Al detalle. Ni un cabo suelto. Y fue así que, ya de salida, el Athletic se empezó a regalar a los ojos sedientos de una afición necesitada de 'algo dulce'. Transiciones vertiginosas. El Athletic Club, bordando el fútbol.
Se estaba viendo, quizás, el mejor juego de la era Marcelino. Exquisito en lo combinatorio. Preciso. Veloz. Meteórico. Y eso que en el doble medio centro se situaban Dani García y Mikel Vesga. La pareja de centrocampistas más despreciada por la mayoría de la masa que sigue al Athletic.
Tal era la animadversión, que, cuando Marcelino escribía sus nombres en la pizarra, la afición ponía su grito en el cielo, "¿Pero no se da cuenta Marcelino que con Dani García y Vesga el equipo es un desastre?"...
A su parsimonia se unían esos robos que sufría cual niño al que se le quitan de las manos sus caramelos. Hasta que el gasteiztarra pensó, Si no espabilo, adiós, Athletic, agur betiko. Incrustado en la zona de influencia, en ese medio donde habita la virtud, Mikel Vesga se dedicó a agilizar el fútbol del Athletic relacionándose con el esférico al primer toque.
Tal fue su exhibición que Marcelino y este cronista de decantaron por el mismo adjetivo a la hora de su valoración: "¡Descomunal!". Tapó bocas el 'Celedón' de la 'Popu'. Esas bocas que durante mucho tiempo se dedicaron a colocar al zurdo medio centro en el equipo más flojo de una liga exótica sin repercusión.
"El discreto encanto de Mikel Vesga". De discreto a llamativo. De llamativo a descomunal. Qué estarán diciendo a estas horas los que se llevaban las manos a la cabeza tras aquella renovación de tres temporadas. Que estará pensando, del mismo modo, Unai Vencedor, que de fijo con Marcelino ha pasado a la reserva.
Bueno vamos a ver si es capaz de mantener una regularidad en el rendimiento. Es cierto que hizo un partido muy bueno, y que lis últimos partidos ha mejorado algo. No es menos cierto que esta temporada ha firmado partidos inaceptables a nivel de fútbol profesional. El del Celta por ejemplo sin ir más lejos. Así que tiempo al tiempo.
Habrá que suponer que a base de entrenamientos este míster ha conseguido sacar afuera lo que tenía y pulírselo. Nunca es tarde. Supondremos también que los que le renovaban algo sabrían... Entrenamiento y no castigo hasta que ha hecho las cosas como se esperaba que era capaz. Que dure. Y este cobra casi lo que se les cae a otros. Importante.