En una semana en la que tanto se habla de las firmas en el Athletic, tras pasar por Lezama, viene bien refrescar una historia. Contaba en su día el viajero espacial (y luego político) Pedro Duque que la diferencia entre los astronautas norteamericanos y los cosmonautas rusos era que los primeros contaban con una tecnología muy sofisticada, "con la que eran capaces de desarrollar un bolígrafo que escribiera hacia arriba sin gravedad", mientras que los rusos tiraban directamente de un lápiz. Sencillo objeto que nunca fallaba, ni siquiera en el espacio.
Y una de las cosas que nos sorprendió en la visita a las impecables y modernísimas nuevas instalaciones de Lezama, con sus tres nuevos edificios ya prácticamente terminados al 100%, fue un curioso objeto con el que nos topamos en el bloque del primer equipo del Athletic Club.
Se trata de un sistema con cuatro planchas y unos rotuladores negros incorporados (y bien atados con una cuerdita para que sigan ahí), para que los futbolistas de la primera plantilla rojiblanca firmen las camisetas que luego imaginamos se regalan o se donan para determinadas causas.
Entre tanta exhibición de tecnología de vanguardia y sistemas de última generación 2.0, la verdad es que se agradeció una nota tan txirene de ingenioso pragmatismo.
En la parte de arriba de la página pueden ver el vídeo en el que se observa este curioso objeto.