El Athletic sueña con los cuartos, pero el vestuario respeta a un Alavés al alza

La tarde del lunes nos ofreció un nuevo sorteo de copa. Tras apear a la SD Eibar, el Athletic Club ya tiene nuevo rival, un contrincante al que ha apeado a menudo en esta competición como es el Deportivo Alavés, equipo con el que ha quedado emparejado en los octavos de final de la Copa del Rey de fútbol y con el que se verá las caras en Bilbao el martes 16 de enero, a partir de las 21.00 horas.

El histórico acumulado hasta la fecha es meramente un dato, pero aparte de ir mucho mejor clasificado en LaLiga y de ser una eliminatoria a partido único en San Mamés, los Leones se han impuesto en siete de las ocho eliminatorias que han enfrentado a ambos equipos vascos en el torneo del KO.

Teóricamente salen por tanto como claros favoritos los bilbaínos, un término al que de todas formas Ernesto Valverde, siempre cauto, tiene un natural recelo y que seguro que su vestuario comparte. Máximo respeto para un rival de la máxima categoría que también se ve a apenas 2 partidos de vivir una semifinal copera.

Fue en la edición de 1939, en la primera competición organizada tras la conclusión de la Guerra Civil, cuando el equipo vitoriano eliminó al bilbaíno en la primera ronda después de ganar tanto en San Mamés, por 1-2, como en Mendizorroza, por un contundente 6-2.

Ése fue el tercer enfrentamiento copero entre Alavés y Athletic, que en 1928 se midieron en una liguilla previa con victoria albiazul en Vitoria (2-0) y empate en San Mamés (0-0). Y en 1932, en una ronda de cuartos resuelta a favor del Athletic ganando los dos partidos, 2-0 en casa y 2-3 a domicilio.

Clara superioridad del Athletic frente al alavés en el global histórico

Los seis últimos enfrentamientos, todos a doble partido, se saldaron también a favor del Athletic, que no perdió además ninguno de esos doce partidos.

En 1940 los rojiblancos ganaron ambos encuentros, por 0-6 y 4-0, y también en 1953 (2-4 y 5-0). Ya más recientemente, en 1981, el Athletic encarriló el pase en San Mamés (3-1) y aguantó el marcador en Mendizorrotza (3-3).A la inversa que en 1985, cuando empató a domicilio (0-0) y resolvió en 'La Catedral' (2-1).

Los dos últimos cruces se remontan a la década de los 90 del siglo pasado. En la campaña 1991-1992, después de empatar en Vitoria (1-1), el Athletic resolvió con autoridad como local (4-1); y en la 1995-1995 los leones ganaron tanto en terreno alavesista (0-1) como en San Mamés (4-1).