Las notas de un Athletic para la historia: aprobados y suspensos de una noche inolvidable

Cuarenta años después, el Athletic Club vuelve a ser campeón. Y eso que parecía que se le aparecían viejos fantasmas cuando un Greif estelar y la falta de acierto de los hombres de arriba provocaron que se llegara a la tanda de penaltis. Ernesto Valverde confió en su guardia pretoriana para el partido más importante del club en el siglo XXI y que respondió con la que, posiblemente, sea la final mejor jugada por el Athletic... La vieja guardia se encargó de poner el broche definitivo.

En ElDesmarque ponemos nota a la actuación de los jugadores rojiblancos en La Cartuja.

Agirrezabala (7): El portero de la Copa fue un manojo de nervios y no demostró la seguridad que sí se le vio en otros partidos. Y eso que no pudo hacer nada para evitar el gol de Dani Rodríguez. De hecho, poco antes dejó un auténtico paradón al disparo de Gio González, el segundo de los tres previos al tanto. En la primera acción de la segunda mitad dejó un paradón de mérito frente a Larin y en la prórroga otra acción de mucho mérito frente a Muriqi. Muy bien en la tanda de penaltis, deteniendo el disparo de Morlanes.

De Marcos (6,5): De menos a más. En la primera mitad estuvo muy tímido, pero después del gol de Sancet empezó a encontrar más huecos por su banda. Se sacó un gran centro en la última ocasión del partido, que Guruzeta cabeceó y otro, muy rasito, que falló Nico Williams.

Vivian (4,5): Lejos del nivel al que nos tiene acostumbrados. Larin le doblegó fácilmente en esa primera acción de la segunda parte que casi resuelve el partido, hizo una falta peligrosa al borde del área... Al menos se sacó un remate peligroso en el tiempo añadido que obligó a Greif a emplearse al máximo.

Paredes (7): Se fajó con Muriqi y despejó, desde el suelo, un balón peligrosísimo que filtró el delantero kosovar en los primeros compases del partido. Se fue desinflando y acabó viendo una amarilla por una falta algo innecesaria y en la acción del gol se echó al suelo quizás algo pronto. Se recompuso y acabó rayando a un gran nivel.

Yuri (6,5): Enchufadísimo, como demostró con las segadas que hizo para despejar a banda una internada del Mallorca y un remate de Copete que podría haber sido el 0-2. Tentó a la suerte con un chut raso y muy lejano que atajó Greif sin excesivos problemas. Se retiró antes del descanso de la prórroga tras romperse muscularmente.

Prados (5): No se vio que le pesara el partido, pero estuvo quizás algo por debajo del nivel al que nos tiene acostumbrados, especialmente en los duelos. Sustituido al descanso por Vesga.

Ruiz de Galarreta (8): No se arrugó ante los que el año pasado eran sus compañeros. De hecho, se le vio bastante suelto y lo probó con varios disparos lejanos que inquietaron a Greif. Llevó la batuta del equipo y distribuyó con mucho criterio.

Iñaki Williams (4): Esta final parecía que estaba destinada a que fuera la suya, pero acabamos encontrándonos con una versión que llevábamos tiempo sin ver. Fallón, algo torpe, sin colmillo. Aún así, la defensa del Mallorca le ató más en corto que a su hermano.

Sancet (7): Apenas había entrado en juego por lo increíblemente vigilado que estaba por la zaga mallorquinista. Y cuando menos se lo esperaban, rompió a su espalda y dejó un gol de puro nueve. Le faltó algo más de puntería en un pase filtrado en el que Guruzeta se quedaba solo ante Greif. Se resbaló varias veces cuando pisaba área rival.

Nico Williams (8,5): No paró de desequilibrar por su banda y la defensa mallorquinista le intentó frenar a base de palos. Ni treinta segundos le bastaron para tener la primera del partido, un disparo desviado que no encontró portería, marcó el gol anulado y le faltó algo más de temple para marcar el empate a uno al borde del descanso. Un regalo a Muriqi desembocó en el vendaval del Mallorca que provocó el primer gol, pero se redimió con el excelente pase filtrado a Sancet para el 1-1.

Guruzeta (7): Entró poco en juego en los primeros minutos, pero fue entrando en calor. Lo probó con un disparo cruzado que detuvo Greif con un auténtico paradón y antes del descanso, con un chut desde fuera del área. También la tuvo con un testarazo que no vio puerta por poco en la última ocasión del tiempo regular.

Los suplentes del Athletic Club

Vesga (7,5): Entró en el descanso, quizás para darle algo más de poder aéreo al equipo. Se asoció muy bien con Ruiz de Galarreta y el Athletic encontró algo más de fluidez en sus botas, aunque dejó también uno de sus habituales 'regalos' que puso en un brete a la afición rojiblanca. Su penalti, resbalándose, quedará para la historia.

Unai Gómez (7): Todo corazón y pundonor. Le dio algo más de intensidad a las disputas y se sacó un centro que Sancet no remató porque se resbaló. Robó bastantes balones y fue un quebradero de cabeza para el Mallorca.

Muniain (7): Lo probó de volea nada más comenzar la prórroga y después con un libre directo que no encontró portería por muy poco. Se diluyó bastante en los siguientes minutos. Marcó un penalti que puede ser inolvidable.

Berenguer (10): Uno de los hombres más importantes de la Copa tenía que ser el autor de un gol para la historia. Gris en la primera parte de la prórroga, en los primeros compases de la segunda lo probó con una cabalgada que culminó con un remate horrible. Se encargó también del balón parado, con poca puntería... Pero acabó marcando ese penalti, y eso es lo que importa.

Raúl García (8): La dosis de veteranía necesaria en los momentos calientes de una final de Copa, y de juego aéreo contra un rival inquebrantable por arriba, pero apenas se le vio. Al menos marcó su penalti en la tanda.

Lekue (7): Un cuarto de hora para el de Deusto, que suplió a Yuri.