De menos a más, Thomas Partey se está empezando a hacer hueco en los planes de Diego Pablo Simeone en este inicio de temporada. El ghanés apenas fue titular en dos de los diez primeros partidos oficiales del Atlético de Madrid, pero las últimas lesiones le han abierto una puerta que de momento está aprovechando.
Thomas no sólo mantiene el centro del campo, distribuye y mantiene el orden táctico del equipo, sino que también marca. Y cuando lo hace, acostumbra a ejercer desde distancias lejanas. Se ha convertido en el francotirador del Atlético de Madrid, con dos goles en este primer tercio de competición desde más de 20 metros.
Su primer gol de la temporada llegó ante el Huesca, en la jornada 6. Fue su segundo partido como titular de la temporada y no lo desaprovechó. No se llegaba a la media hora de juego cuando Thomas se encargaba de poner cuesta abajo el partido para el Atlético de Madrid: desde casi 20 metros, amagó un par de veces antes de sacar un latigazo pegado a la base del palo de Axel Werner. Era el 2-0 del cuadro colchonero, que solventó con facilidad el encuentro ante el equipo oscense.
Más importante aún fue su titularidad ante el Athletic, participando de forma directa en los tres goles del Atlético de Madrid. El equipo de Simeone no encontraba huecos en la defensa bilbaína hasta que Thomas se sacó un recurso de la nada. Él inició la jugada y él mismo la culminó: recibe en la izquierda, recorta hacia dentro y saca un derechazo desde una distancia similar al gol anterior. Iago Herrerín no pudo hacer nada ante tal zambombazo, que supuso el 1-1 de un partido que acabó 3-2 para el Atlético. El propio Thomas, en ese encuentro, dio la asistencia a Rodrigo del segundo gol e inició la jugada del tanto definitivo de Godín.