El Atlético de Madrid ha trabajado este miércoles ante 10.134 aficionados en el Wanda Metropolitano. Una sesión marcada por los fervientes ánimos de la afición, pero también por novedades deportiva en cuanto a la enfermería se refiere.
En el primer entrenamiento del año -el día 1 la plantilla tuvo jornada de descanso-, el uruguayo José María Giménez ya está con el grupo, 22 días después de la lesión muscular en el gemelo que le ha apartado de los tres últimos encuentros de su equipo, ante el Brujas, el Valladolid y el Espanyol, por ese orden.
Aunque no participó por precaución en el partido final a medio campo del entrenamiento, y a la espera del pertinente alta médica, el central charrúa estará ya disponible para la visita del próximo domingo al Sevilla, al igual que Thomas Lemar, reincorporado al trabajo con el grupo desde el domingo, después de superar un golpe.
No se entrenan aun al mismo ritmo que sus compañeros ni Lucas Hernández, al borde ya del mes de baja por un esguince de rodilla, ni Filipe Luis, con una lesión muscular. Ambos, que son seria duda para el encuentro del domingo, siguieron con su puesta a punto en la Ciudad Deportiva de Majadahonda, mientras el resto del equipo se entrenaba sobre el terreno de juego del estadio Wanda Metropolitano.
A la vez, aún sigue de baja Diego Costa, que se ejercitó en las instalaciones del estadio del Atlético, ya de vuelta de Brasil, dentro de su proceso de recuperación de la operación en el quinto metatarsiano del pie izquierdo. El delantero, intervenido el día 5 de diciembre, no reaparecerá hasta el próximo mes de febrero.