Miguel Ángel Moreno,Madrid, 3 abr (EFE).- El Atlético de Madrid, que recortó este martes dos puntos a la ventaja del Barcelona en el liderato de LaLiga Santander con su victoria ante el Girona (2-0) y el empate azulgrana en Villarreal (4-4) se agarra para mirar al liderato al próximo duelo en el Camp Nou y al precedente de 2016, cuando restó nueve puntos.,"Tenemos como objetivo terminar todos los años lo más arriba posible... Miro siempre hacia adelante (en la clasificación) y no me muevo de ahí
Miguel Ángel Moreno
Madrid, 3 abr .- El Atlético de Madrid, que recortó este martes dos puntos a la ventaja del Barcelona en el liderato de LaLiga Santander con su victoria ante el Girona (2-0) y el empate azulgrana en Villarreal (4-4) se agarra para mirar al liderato al próximo duelo en el Camp Nou y al precedente de 2016, cuando restó nueve puntos.
"Tenemos como objetivo terminar todos los años lo más arriba posible... Miro siempre hacia adelante (en la clasificación) y no me muevo de ahí", dijo el entrenador argentino Diego Pablo Simeone después de la agónica victoria conseguida ante el Girona en el Wanda Metropolitano, antes de saber que el Barcelona perdería dos puntos en el Estadio de la Cerámica, aunque pudo haber perdido tres.
La igualada del conjunto de Ernesto Valverde, que comenzó ganando 0-2, llegó a ir perdiendo después 4-2 y logró rescatar un punto 'in extremis', deja en ocho tantos la diferencia entre el primero y el segundo de LaLiga Santander, con 24 puntos por disputarse en las próximas ocho jornadas.
Y a las puertas de un duelo directo, el que tendrá lugar el próximo sábado 6 de abril a las 20.45 horas en el Camp Nou, donde se juegan gran parte de las opciones que tiene el conjunto rojiblanco de acercarse a la posición de privilegio que defiende de forma ininterrumpida desde la jornada 14.
Un partido en el que al Atlético solo le vale ganar, lo que supondría reducir a cinco la distancia y llevarse el duelo en caso de empate a puntos (en la primera vuelta empataron 1-1 en el Wanda Metropolitano), un resultado que solo ha logrado en dos de sus últimos diecisiete encuentros oficiales, los dos en partidos de Liga de Campeones y ambos en el Vicente Calderón (2-0 y 1-0).
Porque en el Camp Nou y en LaLiga nunca ha logrado el Atlético de Simeone imponerse al cuadro culé. El último triunfo rojiblanco en el campo azulgrana data del 5 de febrero de 2006, un 1-3 liguero con doblete de Fernando Torres, gol del argentino Maxi Rodríguez y tanto local del sueco Henrik Larsson. En aquel partido Pepe Murcia era el inquilino del banquillo rojiblanco.
Romper esa racha es una de las claves para el equipo rojiblanco si quiere pelear la Liga. La otra sería agarrarse a un precedente mucho más cercano en el tiempo: el de la temporada 2015-16, cuando recortó nueve puntos en tres jornadas al Barcelona.
Fue entre las jornadas 30 y 33 de esa campaña, cuando el Barcelona partía como líder con 76 puntos y el Atlético sumaba 67, nueve tantos menos, y acababa de caer en Gijón contra el Sporting (2-1).
El Atlético ganó 5-1 al Betis en la siguiente jornada, en la que el Barcelona perdió 1-2 contra el Real Madrid; luego el conjunto rojiblanco venció 1-3 al Espanyol y el catalán cayó 1-0 en San Sebastián; y en la jornada 33 el Atlético ganó 3-0 al Granada y el Barcelona perdió 1-2 en Valencia.
De esta manera, el conjunto rojiblanco recortó nueve puntos en tres jornadas, entre medias había eliminado al Barça en los cuartos de final de la Liga de Campeones -que acabaría en la final de Milán, perdida contra el Real Madrid- y ambos equipos acabaron la jornada 33 empatados a 76 puntos.
La igualdad en la cima de la clasificación se mantuvo tres jornadas más con victorias de ambos, hasta la penúltima fecha liguera, en la que el Atlético perdió en el Ciudad de Valencia contra el Levante 2-1, en un partido en el que adelantó a los rojiblancos Fernando Torres y le dieron la vuelta al encuentro Víctor Casadesús y el italiano Giuseppe Rossi. El Barcelona ganó 5-0 al Espanyol y sentenció el título con un 0-3 al Granada.
Simeone pidió este martes "mirar hacia arriba" y el centrocampista Rodrigo Hernández aseguró que para la plantilla ser segundos en el campeonato "no es un objetivo". El Camp Nou y reeditar la racha de 2016 marcan el camino que el Atlético debe recorrer para convertir sus opciones en una realidad.