David Ramiro
Madrid, 18 ago .- La nueva estrella del Atlético de Madrid, el portugués Joao Félix, vivió una noche agridulce en su debut en la Liga española. Su equipo ganó al Getafe (1-0), pero se retiró lesionado a los 65 minutos, aunque antes tuvo tiempo de deleitar a su nueva afición con una magnífica acción individual en la que se fue de tres rivales y forzó un penalti.
El portugués, que dejó muy buenas sensaciones en la pretemporada con actuaciones destacadas ante equipos de la talla del Real Madrid y la Juventus, acaparó todos los focos en el debut liguero frente al Getafe.
El fichaje más caro de la historia del Atlético de Madrid es el heredero del '7' que ha dejado en la camiseta rojiblanca el francés Antoine Griezmann, cuya placa en el suelo de las inmediaciones del Wanda Metropolitano fue pintada y manchada con latas de cerveza antes del derbi.
Este inicio de Liga supone un nuevo ciclo para el Atlético y Joao Felix es la nueva ilusión de la afición rojiblanca, que ya desde antes del partido, cuando sonó por megafonía su nombre en la presentación de los equipos, fue el que más aplausos se llevó.
Su compatriota Paulo Futre, que también ilusionó en su momento a la afición atlética, se acordó de Joao Félix con un mensaje en sus redes sociales. Con un enlace al vídeo del gol que marcó al Valencia en la primera jornada de la Liga 1989/1990, mandó un mensaje a la nueva perla colchonera: "Tres décadas después, sé que puedes superarlo", escribió Futre.
En la previa, su propio técnico, Diego Simeone, también habló del ansiado debut de Joao Félix. "No estoy preocupado con cargarle la mochila. Lo trato como un futbolista importante que tenemos y trato de sacar lo mejor de él para el equipo", dijo el argentino.
Para el partido, José Bordalás sorprendió en el Getafe con una alineación en la que hubo seis defensas, con el uruguayo Damián Suárez y Marc Cucurella como carrileros con recorrido, y una delantera con dos puntas, Jaime Mata y Jorge Molina.
Ese esquema defensivo del Getafe hizo que al Atlético le costara llegar a la portería rival, aunque sí fue dominador del juego, incluido en los metros finales, en los que una y otra vez una maraña de jugadores azulones frenó el ímpetu del portugués, que estuvo muy poco participativo en la primera mitad.
La segunda parte comenzó igual, pero a los 56 minutos Joao Félix dejó al estadio con la boca abierta tras una buena jugada individual que arrancó en el centro del campo. Se fue de Arambarri con un caño, arrastró con regates en velocidad a tres futbolistas y en el área fue derribado por Bruno. El penalti, desde los once metros, lo lanzó Morata y lo despejó David Soria.
Poco después, a los 65 minutos, su partido terminó. Fue tras un salto con un jugador del Getafe. Quedó tendido en el suelo doliéndose de su pierna izquierda y, tras recibir las atenciones de los servicios médicos, fue sustituido por su compañero Marcos Llorente.
El portugués se marchó del campo lamentando su mala suerte, pero entre los aplausos de la afición rojiblanca, que quiere mimar a la que está llamada a ser su nueva estrella en una temporada ilusionante.