Diego Costa, delantero del Atlético de Madrid, volvió este domingo a la dinámica de grupo y prosigue con el proceso del alcanzar el ritmo de competición, pero aún es duda para el partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Liverpool en el estadio Wanda Metropolitano.
El atacante, que el sábado tuvo trabajo alternativo en el gimnasio, sí se ejercitó al mismo ritmo que sus compañeros en el entrenamiento matutino de este domingo, durante la hora de suave sesión que diseñó el argentino Diego Simeone, que comenzó en el gimnasio y que luego se desarrolló media hora sobre el césped.
A dos días de recibir al Liverpool, Diego Costa es duda para el choque. No ha jugado ninguno de los últimos 16 encuentros de competición oficial a causa de la hernia discal cervical de la que fue operado el pasado 21 de noviembre. Ya se entrena con el grupo progresivamente desde hace dos semanas y podría reaparecer el martes, al menos en la convocatoria frente al club inglés.
Para ese partido, en cambio, está descartado Kieran Trippier, que saltó al césped para entrenarse en solitario en su proceso de recuperación de la operación de pubalgia a la que fue sometido el pasado 4 de febrero, y es improbable la presencia de Joao Félix, con una lesión muscular, y Héctor Herrera, con una tendinopatía en el aductor izquierdo, aunque ya hacen trabajo individual en el césped.
El resto de la plantilla está a disposición de Simeone para el duelo de este martes, para el que aún no ha probado nada respecto a un posible once titular. Este lunes ultimará la preparación de su equipo con un nuevo entrenamiento matutino en la Ciudad Deportiva de la localidad madrileña de Majadahonda.