Éric Cantona, el fichaje galáctico que Jesús Gil tuvo a un paso del Atlético de Madrid
Si hacemos un recorrido por la vida deportiva de Éric Cantona, probablemente saldrían luces y sombras. Desde muy joven, en las categorías inferiores del fútbol francés, ya destacada por encima de sus compañeros pero también empezó a forjar un carácter combativo. Lo que pocos sabían es que incluso estuvo apunto de fichar por el Atlético de Madrid.
Cuando fichó por el Olympique de Marsella empezaron sus verdaderos problemas. Aunque años antes, en el Auxerre, ya le había propinado una brutal patada a un rival del Nantes, por el que lo sancionaron tres meses y por el que estuvo a punto de no jugar con la selección francesa. Jugando para el equipo marsellés, Cantona lanzó un balón a su propia afición en modo de protesta y les increpó, por lo que decidieron venderlo al Nimes, equipo que también le sancionó por lanzarle un balón a un árbitro.
El Nimes no toleró esas actitudes del francés y decidió sancionarle duramente. Sin embargo, el jugador no se lo tomó nada bien y se negó a pedir perdón por su episodio, por lo que decidió rescindir el contrato.
Éric Cantona, un fichaje frustrado en el Atlético de Madrid
Días después de su rescisión de contrato, declaró que se retiraba del fútbol a sus 25 años y Toni Ballester, que tenía muy buena relación con el jugador y era persona de confianza de Ángel Castillo y Daniel Muñoz (quienes consiguieron que Mijatovic recalara en la liga española), creyó que el mejor equipo para que Cantona volviera a despuntar era el Atlético de Madrid.
Según cuenta el diario Marca, los contactos con Jesús Gil se iniciaron, pero no llegaron a concretarse, bien porque el coste económico era desorbitado o por el recelo que provocaban sus anteriores actuaciones tanto dentro como fuera del campo en relación a su comportamiento. La oportunidad se desaprovechó y apareció la figura del seleccionador francés Michel Platini, que convenció al jugador para que fichara por el Leeds United.
Ese mismo año el Leeds se proclamó campeón de liga después de 18 años. Tan sólo le valió medio año al "enfant terrible" para que equipos de la talla de Manchester United quisieran hacerse con sus servicios.
Alex Ferguson fue su entrenador y consiguió 'domarlo'. Después de que el Manchester United estuviera 26 años sin conseguir ganar el campeonato, la llegada de Cantona modificó toda la historia del equipo inglés, considerándolo uno de los mejores jugadores de su historia.