Luis Suárez es, sin duda, el líder del líder. Su llegada le dio al Atlético de Madrid ese delantero que marca diferencias y gana partidos. Este domingo lo volvió a hacer con un gol al Deportivo Alavés que significó el 1-0 final del encuentro y supuso el número 500 de su carrera profesional.
El cabezazo con el que este domingo procuró la victoria a su equipo, un tanto logrado tras un centro del inglés Kieran Trippier desde la derecha, uno de sus principales socios para el gol en el conjunto rojiblanco, se convirtió en el tanto que marca el medio millar de tantos como profesional de Suárez, según su club.
Pocos esperaban el 24 de septiembre, cuando el Barcelona anunciaba su traspaso al Atlético de Madrid como parte de la reconfiguración de la plantilla azulgrana, que daría tal resultado al conjunto rojiblanco, líder con seis puntos de diferencia sobre el Real Madrid y siete al Barcelona -que podrían reducirse a cuatro si el conjunto azulgrana gana a la Real Sociedad-, en buena parte gracias a los 19 tantos del delantero charrúa.
Sus números son incontestables: han valido directamente 11 puntos, contando solo los partidos en los que solo ha marcado él. La victoria de este domingo ante el Alavés (1-0), la obtenida ante el Eibar el 21 de enero (1-2) y la lograda ante el Getafe (1-0) el 30 de diciembre, además de los empates contra el Celta de Vigo (2-2) y el Real Madrid (1-1). Y sin contar otros partidos desequilibrados por sus goles en los que no fue el único anotador, como ante el Athletic (2-1), el Cádiz (2-4) o el Elche (3-1); o su impresionante presentación ante el Granada, con dos goles y una asistencia en 20 minutos (6-1).
Los 19 goles que lleva hasta el momento son, aparte de una cifra que le permitirá seguramente cumplir varias de las cláusulas variables del acuerdo que le permitió llegar al Atlético, el mejor inicio goleador de un delantero en un equipo de la LaLiga Santander en este siglo, y su mejor arranque en cualquiera de los lugares en los que ha jugado: Nacional, Groningen, Ajax, Liverpool y Barcelona.
La carrera de Luis Suárez arrancó un 3 de mayo de 2005, cuando debutó con el Nacional de Montevideo jugando un partido de Copa Libertadores contra el Junior de Barranquilla colombiano. Durante la temporada 2005-06 arrancó su idilio con el gol, con 12 dianas que le permitieron hacerse con la titularidad del histórico conjunto de Montevideo, uno de ellos en el clásico ante el Peñarol.
Pronto saltó a Europa, donde el Groningen le dio la oportunidad y el charrúa respondió: 15 goles en 37 partidos oficiales que le valieron la llamada del Ajax de Ámsterdam. Allí encadenó 111 dianas en cuatro temporadas, 35 en su última campaña en la Eredivisie, que le abrieron las puertas del Liverpool.
En el club inglés recogió el testigo que había llevado Fernando Torres las anteriores temporadas y acabó acumulando 82 tantos, pese a no haber podido lograr los títulos que esperaba, apenas obteniendo una Copa de la Liga.
Esos campeonatos le llegaron en el FC Barcelona, del que se despidió en septiembre como el tercer máximo goleador de la historia del club, con 198 tantos en su historial y 13 títulos en su palmarés: una Liga de Campeones, un Mundial de Clubes, una Supercopa de Europa, 4 Ligas, 4 Copas del Rey y 2 Supercopas de España.
A esos números en competiciones de clubes se suman 63 tantos con la selección uruguaya, de la que también es el máximo realizador con la que ganó la Copa América de Argentina 2011 y fue cuarto en el Mundial de Sudáfrica 2010.
Los 500 goles le llegan en un Atlético al que está sosteniendo en la pelea por el título liguero, un equipo que ha adaptado su juego a él, buscando una versión más asociativa que le permita extraer lo mejor del charrúa. De rojiblanco se ha convertido en el líder del líder, y aspira a superar el medio millar de tantos con más títulos.