La vuelta de Antoine Griezmann al Atlético de Madrid sigue dando que hablar. El regreso del delantero francés al club rojiblanco ha estado envuelta de debates, recuerdos, promesas e ilusión. La que tiene tanto Simeone en el rendimiento del jugador como éste en conseguir grandes éxitos como colchonero.
Tras un periplo de dos temporadas en el FC Barcelona en el que sólo ganó la Copa del Rey de este año, Griezmann quiere repetir los éxitos que sí cosechó en el Atlético, con el que alzó las Supercopas de España y de Europa, así como una Europa League.
Pero hay algo que no ha podido conseguir el galo como colchonero y sigue siendo su gran anhelo en España. En su visita de este viernes al museo del Atlético de Madrid lo ha dejado claro sin necesidad de palabras. Tras un paseo más o menos rápido por las distintas salas del recinto, Griezmann se quedó parado delante de una pieza en concreto: la copa de LaLiga Santander.
El Atlético la ganó justo antes de su llegada en 2014 y justo antes de su regreso en 2021. En ninguna estuvo un Griezmann que se quedó hipnotizado ante la copa ganada esta temporada pasada. La miró fijamente, demostrando que es su gran objetivo como atlético en esta segunda etapa.