Diego Pablo Simeone respira. Poco, pero respira. El técnico del Atlético de Madrid dirigió este jueves una sesión marcada de nuevo por las bajas y por la distribución en dos grupos. En uno de ellos estuvo Koke Resurrección, una pieza clave en los planes del técnico argentino. El capitán está cerca de volver y su presencia ante el Betis no está descartada.
Aunque comenzó la sesión vespertina con sus compañeros, Koke después se quedó en un campo aparte para trabajar con el recuperador Óscar Pitillas. Ahí realizó ejercicios de aceleración, cambio de sentido, conducción y pase. Tiene dos entrenamientos más por delante para saber si podrá estar contra el Betis, tercero y rival directo por las plazas Champions, que está a apenas un punto.
Mientras tanto, Simeone ensayó un once en el que Marcos Llorente y Héctor Herrera formaban el doble pivote, pues Kondogbia está tocado y no podrá jugar en el Villamarín. En los costados, en un teórico 4-4-2, Renan Lodi ocupaba la izquierda y Yannick Carrasco, la derecha.
Además de Koke, otra de las estrellas que sigue recuperando terreno es Antoine Griezmann. El francés tuvo 15 minutos ante el Manchester United y 25 minutos frente al Celta de Vigo. Ha estado casi tres meses sin jugar y sigue cogiendo ritmo, aunque de momento también se perfila como suplente ante el Betis: la pareja de delanteros apunta a estar formada de nuevo por Joao Félix y Ángel COrrea.
Los que no podrán estar seguro son los lesionados de larga duración Daniel Wass y Matheus Cunha. Estos dos se unen a Mario Hermoso, Kondogbia y Savic, este último que además de su problema muscular cumplirá sanción por haber recibido su quinta amarilla ante el Celta.