Al Atlético de Madrid le piden que compita con el Real Madrid y el FC Barcelona... pese a que su plantilla está formada, en buena medida, por descartes de estos dos. Tras el fichaje de Memphis Depay, Diego Pablo Simeone ya tiene en su equipo hasta siete futbolistas que no entraban en los planes del equipo blanco o el cuadro blaugrana, lo que evidencia la gran realidad a la hora de fichar del club rojiblanco ante sus supuestos competidores directos en LaLiga Santander.
Hasta cinco exmadridistas están ya en la plantilla colchonera. El último en llegar fue Sergio Reguilón, en calidad de cedido procedente del Tottenham, después de que el Real Madrid le vendiera en verano de 2020 por 30 millones de euros porque no entraba en sus planes.
Álvaro Morata dejó 66 millones en el Bernabéu cuando se fue al Chelsea y ahora defiende la elástica rojiblanca. Mario Hermoso pasó del Castilla al Espanyol y luego llegó al Metropolitano por 25 millones, mientras que Marcos Llorente llegó directamente desde el Bernabéu por 30 millones porque no entraba en los planes de Zidane.
A esta curiosa lista también se podría añadir a Saúl Ñíguez. El ilicitano, que tiene los escudos del Atlético y del Elche tatuados en su piel, le echaron del juvenil blanco y ha desvelado en más de una ocasión que le trataban muy mal en aquella cantera.
Cinco exmadridistas y dos exculés. Antoine Griezmann se la jugó al Atlético para acabar volviendo sólo dos años después. El Barça pagó los 120 millones de euros de su cláusula en verano de 2019 y luego le cedió en verano de 2021 para acabar traspasándole de nuevo hace apenas tres meses por sólo 20 millones.
Y el último en llegar es Memphis Depay, que llegó con la carta de libertad al Camp Nou hace apenas un año y medio y ha firmado ahora por el Atlético por 3 millones fijos más 1 millón en variables.