La segunda amarilla a Ceballos que reclama el Atleti, vista desde atrás: Koke y Correa se llevan las manos a la cabeza
El derbi de la Copa del Rey en el Bernabéu cayó del lado madridista tras remontar los blancos el 0-1 que cosechó un Atlético de Madrid superior en el primer tiempo. En la segunda mitad, el empuje de los locales y el paso atrás para defender el marcador de los rojiblancos permitió empatar a Rodrygo con un golazo en jugada personal para llevar el encuentro a la prórroga. Allí, la expulsión de Savic marcó el partido. Con diez, el Atlético se defendió como pudo pero no logró evitar la victoria del rival gracias a los goles de Benzema y de Vinícius. Sin embargo, los rojiblancos se quejan de una jugada que pudo marcar el partido.
Minuto 71 de partido, y Ceballos comete una falta sobre Lemar en la frontal del área. Una falta que corta una evidente jugada de peligro (Lemar se llevaba el balón al interior del área) y en la que Ceballos no parece tener ninguna opción de llevarse el balón. El mediocentro madridista lanza la pierna al aire más por intuición que porque sepa dónde está la pelota, buscando un despeje, y derriba al francés del Atleti. Las cámaras de Mediaset captaron el momento desde el fondo y se puede apreciar que Ceballos está lejos de alcanzar el balón. De inmediato, las reacciones de Correa y Koke dejan claro que los futbolistas del Atleti tienen claro que es una jugada de amarilla. Habría sido la segunda. Koke, el capitán, se lleva las manos a la cabeza con incredulidad. La jugada es más que polémica porque tanto en la retransmisión como en otras tomas como la ofrecida en el vídeo superior d esta noticia, queda poca duda de lo lejos que está Ceballos de tener opciones de jugar la pelota.
De la no amarilla a Ceballos, a la expulsión de Savic
Otra queja del Atleti es la segunda amarilla a Savic, aunque es una jugada que deja poco lugar a la duda. Llega tarde a un corte por abajo y derriba a Camavinga cerca del área cuando llegaba a línea de fondo para centrar. La queja de los atléticos viene por esa esa diferencia de criterio de la que se queja la afición rojiblanca. El propio Jan Oblak reconoció al final del partido estar enfadados con algunas decisiones. Sobre la amarilla a Savic y Ceballos, el rojiblanco aseguró que la de su compañero es tarjeta pero la de Ceballos también. Además, apunta, era una jugada clave pues todavía iban 0-1 ganando en el marcador.