Se ha hablado mucho del futuro del Cholo Simeone en el Atlético de Madrid. Con unos resultados espectaculares en LaLiga, el Atleti se mantiene infalible en la clasificación para la Liga de Campeones, tan esencial también a la hora de abordar la continuidad del entrenador argentino y su elevado sueldo el club rojiblanco año tras año.
El último en hacerlo fue el propio Diego Pablo tras el triunfo contra Osasuna en el Metropolitano, confirmado una reunión con los mandatarios del club. "Tengo un año más de contrato y va muy ligado a esto de estar en Champions o no. Hablaremos como hablamos todos los años con Miguel Ángel (Gil Marín, consejero delegado), Andrea (Berta, director deportivo) y Enrique (Cerezo, presidente del club) y buscaremos como siempre lo mejor para el equipo", dijo en ese sentido el técnico, cuyo vínculo concluye en 2024, pendiente de si hay una nueva renovación más allá de ese año, antes del próximo curso.
No estaba tan claro el pase cuando el Atlético se fue al Mundial 2022 con una derrota por 1-0 con el Mallorca. Entonces, era quinto en la clasificación, a 11 puntos del segundo, el Real Madrid. Ahora es segundo, con dos puntos de renta sobre el tercero, también el club blanco. Tan solo había ganado hasta ese momento la mitad de sus partidos: 7 de 14.
Entre aquellas primeras catorce jornadas, con 24 puntos ganados de 42 posibles (un 57 por ciento), y las 21 posteriores, cuando ha conseguido 48 de 63 puntos (un 73 por ciento) hay dos equipos distintos. Irreconocible el primero, imponente el segundo. Sólo ha sufrido dos derrotas en sus últimos 19 choques y ha coleccionado diez victorias en las últimas doce citas. Desde Qatar 2022 en adelante, sumó 15 triunfos, cedió tres empates y sufrió tres derrotas, una menos de las que había padecido en las 14 citas anteriores.
"Ante la dificultad, uno tiene que elegir qué hacer, cómo comportarse. Y creo que tuve, primero, una muy buena respuesta de los futbolistas, porque sin ellos es imposible. Ellos volvieron del Mundial de otra manera, enfrentaron las diferentes situaciones con mucha personalidad y creció muchísimo el equipo", valora Simeone.
"Por hablar de nombres, desde Oblak a Hermoso, al final de temporada de Giménez, que es extraordinario; el momento de Savic, la ayuda de Axel (Witsel) en un lugar que no es el suyo (central derecho en la línea de cinco atrás que ha consolidado de nuevo desde hace doce jornadas, desde la lesión de Reinildo Mandava el pasado 25 de febrero ante el Real Madrid), el crecimiento grandísimo de Molina, ni que hablar de lo que está haciendo Carrasco, que es un jugador extraordinario cuando logra jugar en esa velocidad", explicó.
"La visión de juego de De Paul, que ve lo que no ven los demás; el lugar de Koke (de medio centro en el triángulo de la mitad del campo), que siempre es difícil de explicar en esa posición, porque tiene poca recuperación, pero ve mejor que los demás y nos permite jugar mejor; el momento de Lemar; la ayuda de Saúl; el crecimiento de Barrios; ni que hablar de Morata, Memphis, de Correa, cada uno desde su lugar dándonos ayuda para que el equipo ofensivamente encuentre el gol; la tremenda temporada de Griezmann, que nos genera tener un jugador diferente dentro del plantel, y todos esos chicos que por ahí, en esos pocos minutos que pudieron jugar, dieron lo máximo para que lleguemos al objetivo final. Estoy contento. Fue un año complicado, muy difíciles los primeros seis meses", admitió.