El Atlético de Madrid permanece a la espera de completar sus intereses en este mercado de fichajes. A diferencia de otras temporadas, el equipo rojiblanco ha realizado la mayoría de sus tareas pendientes con varios refuerzos antes del inicio de la pretemporada y además, con un saldo positivo en el mercado.
El Atlético ha cubierto todas las posiciones que Diego Simeone había solicitado, a excepción de la de pivote. Sin embargo, se está trabajando en la llegada de un jugador para esa posición específica. El favorito es el danés Pierre-Emile Højbjerg, centrocampista del Tottenham. Aunque la operación no será sencilla y podría resultar más costosa de lo planeado, los madrileños se encuentran en una buena situación financiera, lo que ayuda a la hora de realizar las negociaciones en su favor tal y como informa Mundo Deportivo.
Además, cuentan con el factor a favor de que Højbjerg está interesado en jugar en LaLiga, y en un equipo que participe en la Liga de Campeones, que es uno de sus objetivos principales para la próxima temporada. El danés ha sido un jugador clave en el Tottenham en los últimos años y su contrato se extiende hasta 2026, lo que significa que no hay una cláusula de rescisión temprana para abaratar la situación recoge Medio Deportivo.
Las operaciones de salida han sido muy eficientes y especialmente con la venta de Kondogbia al Olympique de Marsella por siete millones de euros. Además, el Atlético ha cerrado el traspaso de Renan Lodi, también al conjunto francés por 14 millones de euros, lo que ha contribuido a que el saldo sea positivo. Hasta ahora, el equipo ha obtenido alrededor de 21 millones de euros en ventas.
Azpilicueta y Soyuncu llegaron a Madrid sin coste de traspaso. En el caso de Javi Galán, el club rojiblanco desembolsó aproximadamente cinco millones de euros, además del traspaso de Manu Sánchez. Mientras que el fichaje de Mouriño del Racing de Montevideo supuso una suma de alrededor de 2,5 millones de euros. En resumen, el gasto total de los rojiblancos en fichajes hasta la fecha ha sido de poco más de 7,5 millones de euros.
Las finanzas del Atlético no corren peligro y es que por el momento, las arcas colchoneras, tras el Wolverhampton Wanderers que ya hizo efectiva la cláusula de compra por Matheus Cunha hace algunos meses donde finalmente se concretó por 50 millones de euros. Además, el club recibió un adicional por la venta de Lucas Hernández al Paris Saint-Germain. Esta transferencia generó una suma de más de 2,5 millones de euros que ingresaron en el equipo rojiblanco tal y como recoge Medio Deportivo. El objetivo sigue siendo el mismo, tener buena estabilidad financiera y mantener su competitividad de cara a la próxima temporada.