Ángel Correa, el eterno revulsivo

Ángel Correa llegó al Atlético de Madrid en 2015. Tras ocho temporadas como colchonero, parece que su estatus en la plantilla nunca cambia. El argentino siempre suele terminar la temporada entre los máximos goleadores del conjunto madrileño; sin embargo, llegar a asentarse como titular habitual se convierte en una dura tarea cada año. De hecho, si hablamos de grandes revulsivos del fútbol español de la última década, en la lista siempre aparece el '10' rojiblanco.

El eterno revulsivo

El inicio de la campaña 23/24 es la prueba de que la historia está condenada a repetirse una y otra vez. El delantero de Rosario suma 27' en los cuatro primeros partidos ligueros -aunque repartidos en dos encuentros-, tiempo que aún así ha aprovechado al máximo para anotar un gol y dar una asistencia. Ambas en la goleada por 0-7 en Vallecas.

Podría parecer anecdótico si no quedaran registros de las estadísticas de su carrera en España. Correa sólo sumó dos titularidades en los primeros diez partidos de liga en la 22/23, siendo la primera de ellas en la quinta jornada, al igual que terminó la 21/22 con únicamente tres titularidades en los últimos diez encuentros.

Si miramos la clasificación de minutos de los delanteros utilizados por Simeone en todas las competiciones del ejercicio anterior, el atacante aparece en cuarta posición con 1928'. Muy lejos de sus compañeros que componen el podio: Antoine Griezmann con 3625', Yannick Carrasco con 2862' y Álvaro Morata con 2496'.

El peligro de las etiquetas

Las etiquetas siempre son peligrosas. Y este caso lo demuestra. A lo largo de los años, Correa ha tenido muchos momentos de protagonismo pero nunca ha gozado del cartel de indiscutible que se le cuelga a otros atacantes de su mismo nivel. Siempre es la gran duda de las alineaciones y todos esperan que haga su aparición estelar en los minutos finales. Eso tampoco es fácil, pero el debate sobre si Correa será titular o no en este Atlético de Madrid vuelve a salir a la palestra una temporada más.