Saúl Ñíguez, futbolista del Atlético de Madrid, desveló este viernes que "hubo un momento" en el pasado "que venía a entrenar y no disfrutaba", además de que lo pasaba "realmente mal", y que fue "la tranquilidad y la estabilidad" de su familia y su "entorno" quienes le sustentaron en ese tramo de su carrera.
"Ellos son los que me han mantenido realmente. Hubo un momento que venía a entrenar y no disfrutaba, que lo pasabas realmente mal y al final fuera de aquí encuentras un entorno agradable, que te sustenta y te apoya en todo a pesar de que las cosas no salgan bien. Eso ha sido para mí, clave", explicó en declaraciones a los medios oficiales del club rojiblanco.
Saúl ha recuperado su nivel. También el número '8'. "Cuando vuelvo en verano ya estaba apalabrado que Antoine Griezmann iba a coger otro dorsal, porque el '8' para él no era especial y para mí sí es especial. El club decidió dármelo después de mi petición. Para mí era muy especial. Es un dorsal muy importante para el club y yo quiero ser importante a pesar de jugar más o menos, que no tiene nada que ver", valoró.
El Atlético suma cuatro victorias consecutivas. "El equipo está bien, en una buena dinámica. Lo más importante es que sabe reponerse a las adversidades, adaptarse a todo lo que viene y el buen equipo tiene que adaptarse a eso, a las lesiones, a ponerte con el marcador en contra y a superar diferentes adversidades. El equipo está en un buen momento, teniendo esa paciencia y esa calma y está obteniendo resultados", apuntó.
El próximo domingo recibe a la Real Sociedad, un rival que "tiene grandísimos jugadores, que se encuentran en el mejor momento de su carrera", según explicó Saúl. "Está haciendo una temporada muy buena. Es un rival que juega muy bien al fútbol y este año ha sumado la agresividad defensiva, que eso le da muchos puntos. Va a ser un partido muy bonito y muy difícil de jugar", declaró.