Los dos descartes que pasaron a ser imprescindibles en el Atlético de Simeone
El Atlético de Madrid ha encontrado la fórmula para ser un equipo capaz de competir con Real Madrid y Barça esta temporada. Con cinco triunfos consecutivos y un Metropolitano en racha, Diego Simeone ha encontrado a sus futbolistas fijos en el once, dos de los cuales han sido capaces de reconducir su situación meses después de tener su futuro más fuera que dentro del club rojiblanco. Hablamos de Axel Witsel y Saúl Ñíguez.
Witsel ya no es un parche para Simeone
El jugador belga llegó como un chollo de mercado al llegar libre del Borussia Dortmund en verano de 2022. Sin embargo, el técnico argentino lo empleaba como un parche para el centro de la zaga ante las bajas en vez de desempeñar la posición de pivote, el motivo principal por el que le fichó Gil Marín. Una función que, en su primera temporada, no cumplió.
Aún así, en los primeros meses de su segundo año se ha asentado fielmente para ser un indiscutible en defensa. En total ha disputado 750 minutos, siendo el cuarto de la plantilla que más tiempo ha disputado por detrás de Oblak, Hermoso y Griezmann. Ante las bajas de competencia como Savic, Giménez y la llegada de fichajes como Azpilicueta y Soyuncu, el belga ha sabido adaptarse y Simeone ya no valora moverlo en la defensa de tres por mucha urgencia que haya en tener un pivote.
Saúl recupera la versión que soñaba el Atlético
Otra gran noticia para el Atlético es que ha conseguido recuperar la mejor versión de Saúl Ñíguez. Su bajo nivel hizo que tuviera que marcharse al Chelsea hace dos campañas y este verano tuvo grandes opciones de poner fin a su carrera en el Metropolitano.
Pese a ello, el ilicitano aguantó la presión para volver motivado y pelear un puesto en el once que se ha ganado a pulso. Es el octavo jugador que más ha empleado Simeone (624 minutos) y, con la baja de Thomas Lemar, su competencia se ha limitado considerablemente. Sus cinco asistencias le avalan como el máximo asistente en Liga y es fijo en la medular del Atlético.
"A la gente que trabaja y tiene la humildad de saber esperar su momento y, cuando le toca, aprovecharlo a mí me pone contento porque es la gente que queremos dentro del equipo", expresaba Simeone después del partido en Osasuna.