El Atlético de Madrid no pudo superar el empate en su visita al Celtic Park. El equipo de Diego Pablo Simeone buscó la remontada tras estar solo 7 minutos, de los 50 que duró la primera parte, con empate en el marcador. El gol en el minuto 4 de Furuhashi y en el 28 de Luis Palma, hicieron que los colchoneros se fuesen perdiendo 2-1 al descanso.
En la segunda parte, con varias sustituciones, Morata anotó el 2-2. El partido parecía acercarse hacia la victoria colchonera hasta que Felix Zwayer, el árbitro del encuentro, expulsó a Rodrigo de Paul en el minuto 82.
En el minuto 87, cuando el Atleti ya contaba con 10 jugadores sobre el terreno de juego, ocurrió una curiosa secuencia entre Simeone y Felix Zwayer. Antoine Griezmann, MVP del partido, recibió un golpe en el rostro de un defensor del equipo escocés. El árbitro pitó la falta al francés, tirado en el terreno de juego, y pidió a los fisios del Atlético de Madrid que entrasen a atender al delantero.
Para no quedarse con 9 jugadores, Simeone se negó a que los fisios pasasen al terreno de juego. Griezmann, recuperado del golpe, insistió al colegiado para que no fuese atendido por las asistencias médicas, ya que se encontraba en perfectas condiciones.
Zwayer decide mandar a Griezmann fuera del campo, por haber recibido un golpe en la cabeza. Simeone, que se percató de esto, empujó a los fisios para que ahora sí entrasen en el campo para tratar al francés y así agotar algunos segundos más del encuentro. Teniendo 9 jugadores en el campo, con la falta a favor, el Cholo le indica a Koke, el encargado de lanzamiento, que mande el balón fuera, a la altura del área rival, con el objetivo de que Griezmann pudiese acceder rápidamente al terreno de juego.
Simeone consiguió salirse con la suya en su última 'pillería' que algunos aficionados catalogaron como 'masterclass' del técnico argentino.