El Atlético de Madrid ha conseguido la épica. Los rojiblancos estarán este viernes en el bombo del sorteo de cuartos de final de la Champions League. Lo han conseguido después de doblegar al Inter de Milán en un partido lleno de emoción y tensión que se ha resuelto en la tanda de penaltis.
Una vez que el balón ha salido de los pies de Lautaro y se ha determinado la clasificación del equipo madrileño, se ha liberado toda esa tensión y la locura se ha desatado en el Civitas Metropolitano.
El Cholo Simeone se ha mostrado muy emocionado durante los momentos posteriores a la clasificación. Muy nervioso en la tanda de penaltis, apenas ha mirado los lanzamientos y, después, se ha dejado ver con lágrimas en los ojos.
Y es que esta temporada no está siendo fácil para el técnico argentino, que después de la eliminación copera y la situación en la liga, se aferraba a la Champions como la única vía de éxito.
Sobre el césped ha ido abrazando a todos y cada uno de los futbolistas atléticos. También ha consolado a Lautaro después de su error. El abrazo con Gustavo López reflejaba el sentir del técnico en ese momento.
Ni un alma se ha movido de las gradas del Metropolitano al término de la tanda de penaltis. Y es que la fiesta se ha prolongado durante varios minutos sobre el verde. Y no es para menos. El equipo ha logrado la clasificación ante uno de los equipos más en forma de todo el continente.
La comunión entre hinchas y deportistas ha sido tremenda durante todo el encuentro y, como no podía ser de otra manera, la alegría ha quedado demostrada al sellar su presencia en cuartos de final.