La Bundesliga ha tomado una decisión. Aunque no era la que tenían en mente. Las protestas de los aficionados han logrado cambiar la opinión y, finalmente, los inversores privados no entrarán en el fútbol alemán. Una decisión que han comunicado oficialmente este miércoles.
Según las informaciones dadas por 'BILD' y confirmadas en Marca, el presidente de la DFL ha decidido no seguir con la idea original. "A la vista de los acontecimientos actuales, ya no parece posible una continuación exitosa del proceso", dijo Hans-Joachim Watzke, portavoz de la DFL.
Lo que buscaban los aficionados alemanes con sus protestas era frenar la idea que tenía la Bundesliga de negociar la incorporación de un inversor de capital privado. Todo con la intención de impulsar y mejorar los derechos televisivos. O eso decían desde la liga alemana, algo que no se creyeron los aficionados.
La respuesta del portavoz ha sido clara: "A la vista de los acontecimientos actuales, ya no parece posible una continuación exitosa del proceso. Aunque una gran mayoría está a favor de la necesidad empresarial de una asociación estratégica: el fútbol profesional alemán se encuentra en medio de una prueba que se lleva a cabo no sólo en el seno de la asociación de liga entre los clubes, sino también en parte dentro de de los clubes. Entre profesionales, entrenadores, directores de clubes, órganos de supervisión, asambleas generales y comunidades de aficionados, se generan importantes disputas que ponen en peligro cada vez más el funcionamiento del juego, los procesos específicos del juego y, por tanto, la integridad de la competición", aseguró.