En el club se da la callada por respuesta cuando se pregunta por la situación de Pablo y Juan Villar, pero lo cierto es que ambos tienen la puerta abierta si quieren acabar marchándose.
El hasta ahora capitán cadista medita marcharse al fútbol extranjero, ya que tiene complicado encontrar un contrato similar al del Cádiz en algún equipo español. Su caché ha quedado devaluado con la última campaña, y eso ha supuesto un lastre para el mediapunta al que le quedan dos años de contrato.