"Poco a poco sigo cogiendo sensaciones haciendo lo que el entrenador pide. Cambian mis movimientos en el campo después de cuatro años en el mismo equipo con el mismo entrenador", dice el jugador.
El técnico cadista le pide sobre todo mayor verticalidad, porque en el Loja fue un jugador decisivo para descomponer las defensas rivales: "Quiere que participe por dentro cuando el equipo se atasca, pero me pide mucha verticalidad ganándole la espalda a la defensa rival, y aprovechando la velocidad que tengo. Tenemos que hacer muchos goles para alcanzar el objetivo".
Ser eficaces es el principal objetivo para el inicio de la temporada, porque durante la pretemporada se han desperdiciado numerosas ocasiones: "Un equipo como el nuestro que llega tantas veces a puerta contraria tiene que meter el 80 o 90 por ciento de las ocasiones, eso nos va a diferenciar del resto de equipos. Vamos a ir cogiendo poco a poco el ritmo para ir a mejor".