Las cuatro ausencias ha provocado que Raúl Agné tenga que utilizar hasta a diez jugadores del filial. De inicio comenzaron Sana, Alberto, Ángel, Michele, Gabi, Bruninho y Galindo. Más tarde se comunicaba al entrenador del filial que también tenía que prescindir de Rafi Cruz, Caballero y Riki, que terminaron la sesión con la primera plantilla.
Durante el entrenamiento Kike López se llevó un golpe en uno de los ejercicios de Michele, que tras la reprimenda correspondiente de Raúl Agné al italiano, no impidió al salmantino finalizar la sesión.