Inicialmente tenía muchas dudas sobre la conveniencia de jugar en Segunda B y por eso las negociaciones se habían estancado. Cuando ayer atendía a esta web telefónicamente se limitaba a decir que "no puedo decir nada, no sé qué va a pasar". Sin embargo, la influencia de su familia ha sido decisiva en las últimas horas y parece que, finalmente, va a jugar en el Cádiz.
Carlos Medina, apoderado de Locos por el Balón, ha señalado a Diario de Cádiz que el tema está resuelto: "Se han cerrado los flecos normales de última hora y el acuerdo es total para que se incorpore al Cádiz". Incluso podría viajar a Cádiz en las próximas horas para incorporarse a la plantilla. De ser así y si no se produce otro cambio de opinión, será una buena noticia para el cadismo.