"Somos un grande, pero tenemos que correr como un chico"

En el mediodía de este martes ha sido presentado Claudio Barragán como nuevo técnico del primer equipo del Cádiz Club de Fútbol. El entrenador valenciano estuvo acompañado por Alfredo Santaelena, su segundo entrenador, el presidente Manuel Vizcaíno y el director deportivo Jorge Cordero.

El presidente tomó la palabra al principio para explicar la decisión y desearle suerte a Claudio. "Hay que mirar hacia adelante. Tenemos la ilusión con Claudio de conseguir el objetivo de ser primeros y subir a Segunda División. Ha sido el elegido por muchos motivos, el principal es que en él encontramos las características técnicas y personales necesarias como revulsivo para no quedarnos con la posibilidad de jugar el play off, sino de subir de categoría", explicó.
Acto seguido, fue Claudio el que tomó la palabra para explicar las motivaciones que le han llevado a aceptar el puesto de entrenador del Cádiz, relevando a Antonio Calderón. El valenciano tiene claro que es un reto muy interesante. "Mucha gente creerá que puede ser un paso atrás al venir de Segunda, pero para mí es todo lo contrario. Es un orgullo trabajar para el Cádiz, una ilusión tremenda, y sé de la exigencia del proyecto", aseguró.
El nuevo entrenador amarillo confirmó que ha firmado hasta final de temporada, aunque renovará automáticamente si consigue el ansiado ascenso a la categoría de plata. Explicó también cómo se llevaron a cabo las negociaciones. "Me llamaron el mismo domingo, estaba viendo el Albacete-Osasuna. Jorge Cordero me convenció con lo ambicioso del proyecto a corto plazo".
 

Claudio da continuidad al discurso que desde la institución se lleva emitiendo desde que comenzara a planificarse la temporada 2014/15. "Estamos en un club privilegiado para futbolistas y entrenadores. Sabemos de la exigencia y la dificultad, porque somos el equipo a batir de la categoría. El objetivo es quedar primero y subir, pero no podemos pensar en eso si no afrontamos a corto plazo", espetó.
Además, dio las claves de lo que espera de la plantilla. "Somos un equipo grande pero para ganar hay que correr como uno pequeño, luego la calidad decide. El Cádiz tiene jugadores muy verticales y tenemos que buscar sobre todo la profundidad. Quiero que seamos atrevidos y presos de presa. Hay que ser ingratos respecto al rival. En el fútbol no se puede ser previsible. Hay que buscar alternativas dependiendo el rival y lo que se puede hacer en cada momento. No es cierto que me guste el fútbol directo pero es una alternativa más del juego", explicó.
El entrenador aseguró que conoce al “90% de la plantilla” y que está en periodo de conocer el resto. Por último, comentó que había hablado horas antes con Antonio Calderón. “Somos muy amigos porque fuimos compañeros, realmente me ha dolido su destitución porque le aprecio"