Para nadie es un secreto que el técnico del Cádiz, Claudio Barragán, no está pasando por su mejor momento profesional. Los resultados no acompañan a los suyos, que han sumado dos derrotas en los dos últimos encuentros y la crispación por la imagen que ofrece el equipo se palpa en el ambiente.
El Cádiz tiene un objetivo muy claro desde que arrancó la campaña y más teniendo en cuenta el fracaso estrepitoso del último curso al rozar el ascenso a Segunda División A. Como en muchos otros clubes, el plano deportivo se mezcla con el institucional que, en ocasiones, desequilibra a los equipos.
Al menos es lo que piensa Claudio Barragán, pues considera que la tranquilidad en el entorno del club no ha existido desde que arrancó la campaña: "El principal problema desde que empezamos la temporada es que no ha habido tranquilidad y las cosas no han ido bien".
"Cuando el equipo ha dado buenas sensaciones y las cosas han salido bien, han salido cosas para buscarle los tres pies al gato. Cada uno es dueño de sus actos". El preparador cadista ha querido dejar claro que él sigue a lo suyo: "Lo único que estoy concentrado y sigo exigiéndome en mi trabajo, en el día a día y sacarle el mayor rendimiento a los futbolistas. La afición tiene que estar con el equipo y nosotros tenemos que responder. No me cabe la menor duda de que responderemos porque hay talento".