El análisis de Salvi Mejías, el último pichichi cadista

La gran temporada que está haciendo Alfredo Ortuño en el Cádiz CF trae a la memoria del cadismo cifras de otros tiempos. Tener 15 goles a estas alturas de la temporada es algo poco habitual para jugadores que hayan vestido la camiseta amarilla y está en disposición de pulverizar algunos récords.

Según la cuenta de Twitter @CadizStats hacía 32 años que un jugador del Cádiz no marcaba 15 goles en Segunda. El último fue Salvi Mejías y lo logró en la temporada 1984-85, que concluyó ganando el trofeo Pichichi de la categoría, con 16 antes, por delante de Coke Contreras, de Las Palmas, que hizo 15, mientras que su hermano Pepe y Manolo, que fue internacional en el Atlético de Madrid y que jugaba entonces en el Sabadell, hicieron 14. 
En declaraciones a ElDesmarque, Salvi Mejías destaca el dato de que "en 100 años de historia sólo Baena y yo hemos sido pichichis. Ahora no es que sea más fácil, pero hay más partidos, el campeonato es más largo y antes los equipos eran muy igualados. Antes en Segunda casi todos eran equipos que venían de Primera. Ahora están muy devaluados, como el Zaragoza o el Mallorca".
De Ortuño dice que "es un gran delantero, un tío que se mueve, busca el gol en todo momento y eso es fundamental. Nosotros jugábamos con dos extremos, Mágico y yo y sin delantero, sólo con mi hermano Pepe llegando desde atrás"
Sólo jugó tres campañas en el primer equipo cadistas, pero las cifras fueron muy buenas: "Yo conseguí dos ascensos y la permanencia en Primera". Ahora ve como espectador la gran temporada del equipo de su ciudad y espera que lleguen los mismos éxitos, pero con los pies en el suelo: "La moral que tiene el equipo no se la quita nadie. Todos hemos dudado que lograra tan fácilmente la permanencia y ahora la gente tiene que estar contenta donde está y ojalá juegue el play off y puede dar la sorpresa. No se le puede pedir ahora el ascenso directo".