Una carrera de obstáculos en el sueño del Cádiz

Con la dolorosa eliminación frente al Tenerife en play off, el Cádiz CF se quedó a solo un paso de lograr una hazaña que pocos cadistas hubieran imaginado al inicio del curso: el ascenso a Primera división. Aunque en el cadismo también quedará para el recuerdo las malas actuaciones arbitrales que han resultado decisivas, tanto en la ida en Carranza como en la vuelta en el Heliodoro. Un colectivo que ya había perjudicado a los amarillos en varias ocasiones durante la fase regular del campeonato.

La afición del Cádiz no va a olvidar tan fácilmente las decisiones arbitrales en la eliminatoria ante el Tenerife. El primer error grave llegó en el partido de ida cuando Arcediano Monescillo anulaba un tanto legal a Aridane en la primera mitad por una supuesta falta previa de Sankaré a Germán Sánchez.
El segundo y el tercero llegaron este domingo en el Heliodoro Rodríguez López. En primer lugar, Areces Franco decidió no señalar una mano flagrante de Gaku Shibasaki en el área con 0-0 en el marcador. Y posteriormente, le perdonó a Raúl Cámara la segunda amarilla hasta en dos ocasiones, cuando incluso debió expulsar al lateral derecho del Tenerife por su entrada criminal a Garrido en la primera cartulina.Errores arbitrales que indignan al cadismo: De Anduva al Heliodoro Rodríguez pasando por el Coliseum 
Lo más cruel de todo para el cadismo es que en el play off se ha acabado confirmando la tónica general de toda la temporada. Los errores arbitrales vienen de atrás y han impedido que el Cádiz sacara un premio mayor en algunos partidos.
Ya en la jornada 3 ante el Mirandés en Anduva, Ais Reig expulsó en el minuto 40 a Gorka Santamaría por doble cartulina amarilla. La primera de esas tarjetas la vio cuando acudió a beber agua antes de poner el balón en juego.
La afición del Cádiz tampoco olvida la actuación de Pulido Santana en el Coliseum. Primero, anuló un gol legal a Ortuño por posición antirreglamentaria cuando el murciano estaba en línea con la defensa del Getafe y después pito un penalti muy dudoso en la última jugada que acabaría dándole la victoria al Getafe. 
A todo esto hay que sumarle que el Cádiz ha finalizado la fase regular como el equipo con menos penaltis a favor de toda la Segunda división con sólo dos y que se pasó 253 días sin tener una pena máxima.
Varios errores que han ido minando la moral de la afición del Cádiz durante la temporada y que han acabado siendo decisivos en el peor momento posible, en el play off de ascenso a la máxima categoría del fútbol español.