Pese al buen número de kilómetros que separa Cádiz de Mallorca -más de 1.000-, el color amarillo estuvo presente en las gradas de Son Moix durante el duelo frente al RCD Mallorca. La afición del Cádiz no pudieron disfrutar de un triunfo y tuvieron que presenciar cómo su equipo dejaba escapar el empate en el último minuto.
Esta afición es imparable. Da igual que el encuentro sea entre semana, el horario e incluso el desplazamiento.
El Cádiz no estuvo solo en la primera de las tres citas a domicilio que ha de afrontar en un periodo de diez días. Aproximadamente un centenar de aficionados presenciaron el duelo ante el Mallorca en Son Moix para animar a los de Álvaro Cervera y así buscar el triunfo.
No es el primer desplazamiento de la temporada que esta hinchada protagoniza, pues ya ante el Numancia, la afición amarilla acudió a la cita en Los Pajaritos (Soria).
El primer viaje de la trilogía ha tenido como destino las Islas Baleares para el encuentro de la cuarta jornada de Liga. Un partido complicado ante un recién ascendido, pero que quiere pelear por todo tras un año en el infierno de Segunda B. De hecho, así lo está demostrando y ya ha sumado 9 puntos de los 12 jugadores por el momento.
Después tocará el turno de la eliminatoria copera en el Heliodoro Rodríguez López. El Cádiz tendrá la oportunidad de nuevo de tomarse la revancha ante el Tenerife, que se ha convertido en la gran pesadilla cadista de las dos últimas temporadas.
Y para acabar, el conjunto amarillo rendirá visita al Carlos Belmonte para enfrentarse al Albacete. Un duelo que contará con el morbo adicional del reencuentro con Alfredo Ortuño, el último gran goleador que ha defendido la elástica del Cádiz.