El devenir tanto del Cádiz como de la UD Las Palmas en las últimas jornadas ha cambiado y mucho. Ambos se miden este sábado en Carranza y lo hacen en situaciones totalmente opuestas. Mientras el cuadro de Cervera acumula cuatro victorias seguidas, los canarios suman el mismo número de jornadas sin conocer la victoria, lo que propició la destitución de su entrenador.
Mucho ha cambiado en las últimas semanas la situación del Cádiz y su próximo rival, la UD Las Palmas. Ambos se verán las caras la próxima jornada con intenciones diferentes. Los gaditanos quieren seguir prolongando su buen hacer, mientras que los isleños pretenden cortar la racha de cuatro jornadas consecutivas sin conocer el triunfo.
La irregular marcha del equipo propició la pasada semana la destitución de Manolo Jiménez y la vuelta al banquillo de Paco Herrera, que se sentará en el banquillo de Carranza por primera vez este curso con la UD Las Palmas. Lo más llamativo es que en esos cuatro encuentros, el equipo sólo empató, pero la falta de paciencia precipitó la mencionada destitución.
Todo lo contrario ocurre actualmente en el Cádiz, donde todo es alegría. La victoria del pasado domingo en Córdoba supuso la cuarta consecutiva en Liga, además de la cosechada en Copa ante el Espanyol. Antes de la victoria en El Arcángel, Lugo, Elche y Reus sucumbieron ante los pupilos de Cervera, que ya se encuentran de nuevo a tiro de piedra del play off.
Los canarios, pese a todo, continúa ostentando la sexta plaza del play off con 22 puntos, aunque sus perseguidores están cada vez más cerca. El propio Cádiz, si consigue la victoria este sábado, adelantaría a los de Paco Herrera en la tabla y con algo de suerte podrían incluso dar alcance a los puestos nobles de la tabla. Un triunfo desbordaría aun más la ilusión recuperada.