Cifuentes en El Faro: cocina y mucho fútbol
El guardameta Alberto Cifuentes ha sido protagonista en una nueva edición de A ponerse las botas, el programa de LaLiga123TV que comparte cocina y fútbol. En esta ocasión ha sido elegido el restaurante gaditano El Faro, donde el chef Mario Jiménez ha compartido muchos de sus trucos con el portero cadista. En un programa de más de 40 minutos de grabación, Cifuentes aprendió a cocinar las típicas tortillitas de camarones y el pargo a la roteña, dos platos emblema del restaurante gaditano.
El jugador cadista se puso la primera equipación de El Faro con una chaquetilla personalizada. "Lástima que los árbitros no me van a dejar ponérmela", bromeaba.
"A ver si no me cargo las recetas", decía el albaceteño, que empezó la faena limpiando la cebolleta y el perejil para la elaboración de las tortillitas de camarones y demostró bastante destreza. Le decía Mario Jiménez que la portería y la cocina se parecen porque "de 100 veces, aunque lo hagas todo bien en 99 ocasiones, te van a recordar por la que te equivocas". "La diferencia es que si el cocinero lo hace mal, el cliente no vuelve, pero si la lío yo ese vuelvo para ver si fallo otra vez", respondió el portero.
"Es un mundo apasionante el de la cocina y me gusta mucho comer bien, pero sano. Cuando uno tiene una edad tiene que cuidarse. En casa no faltan mis pechuguitas a la plancha, los caldos, las cremas. Estos últimos diez años he aprendido a comer y te das cuenta de que hay que aprender muchas cosas. Estoy contento, me encuentro en buen momento. A nivel personal me siento muy cómodo aquí, me siento muy joven a pesar de la edad, muy fresco de cabeza y eso es fundamental en cualquier ámbito de la vida", dijo.
Sobre el funcionamiento defensivo del equipo señaló que "desde que estoy aquí hemos sido un bloque muy compacto, con gente muy involucrada. Es una pasada verlos correr delante de mí. Valoras mucho los detalles técnicos, pero es tremendo verlos correr. Estoy muy orgulloso de pertenecer a este equipo".
Le salió muy bien una de sus primeras tortillitas de camarones y se la quiso dar a Servando, para el que tuvo palabras de reconocimiento: "Por la amistad que tengo con él y por cómo lo ha pasado estos meses, lo que significa el Cádiz para él, se la daría a Servando con todo el cariño. Es un máquina. Desde que vine aquí tengo una relación muy buena con él".
Reconoce que Álvaro Cervera "no es muy obsesivo" con el control de la comida, aunque añade que "la gente de la plantilla es muy responsable y no cae en excesos. Yo si me salto la dieta sería para tomar un pollo frito con ajo, pero no lo como nunca".
Hablando de la afición cadista destacó cómo se valora el trabajo del colectivo: "Es un equipo comprometido, la gente que viene sabe lo que es el Cádiz; el Cádiz de Cervera con un fútbol rápido, a la contra, y la gente se va contenta a casa incluso sin haber ganado y eso es muy importante".