Un cumpleaños siempre debe ser un motivo de alegría, pero en este caso coincide con un complicado momento profesional de un futbolista del Cádiz. Brian Oliván cumple este lunes 25 años y desde el propio club lo han felicitado públicamente, aunque está claro que ha vivido mejores etapas en la entidad gaditana.
El barcelonés lleva dos meses sin jugar ni un minuto y resulta especialmente llamativo porque hasta ese momento era indiscutible en su puesto. Aunque hay que recordar que en el inicio de temporada vivió una situación similar porque no contó con la confianza de Cervera hasta la décima jornada, contra el Sporting, después de que el equipo tocara fondo en Almendralejo.
Brian pasó a ser titular después de muchas jornadas sin ir convocado y ahora hay que marcar el partido en Oviedo como el último en la presente campaña. No se puede decir que su rendimiento haya sido malo en líneas generales, más bien al contrario, pero el entrenador cadista ha decidido que ocupe el tercer lugar en el escalafón del lateral izquierdo.
Cabe recordar que el club decidió fichar en enero al lateral uruguayo Espino, por lo que la situación exigía la salida de alguno de los laterales zurdos de la plantilla, pero finalmente todos se quedaron y el damnificado ha sido, precisamente, el que venía siendo titular hasta ese momento. Su nombre sonó para reforzar algún equipo de Primera, pero no fructificó ninguna operación y el barcelonés continuó en el Cádiz.
Ahora está entrenándose como uno más y huye de cualquier polémica para centrarse en el interés general del equipo. Desde su entorno tampoco se quiere comentar la situación, que de seguir así necesitará una solución el próximo verano. El Cádiz ejerció la opción de compra en 2017 y se comprometió a pagar 500.000 euros por el lateral, que tiene contrato hasta 2021.