Rober Correa no va a seguir en el Cádiz. El lateral derecho jugó en Gijón su último partido con la camiseta amarilla y se ha despedido en las redes sociales con un mensaje en el que agradece el apoyo recibido en las dos campañas en las que ha defendido el escudo.
"Hoy es uno de los días más difíciles de mi vida y no sólo futbolísticamente hablando sino también de forma personal, ya que el sábado fue el último día que vestí la camiseta del Cádiz como jugador", dice.
"Sólo quiero daros las gracias a todos por esas muestras de apoyo que siempre habéis tenido hacia mí. Me habéis hecho sentir una persona infinitamente feliz a mi familia y a mí estos dos años", prosigue el lateral, que maneja ofertas del Girona y del Tenerife.
"A continuación quería agradecer a toda mi familia que es mi bandita; gracias porque me he sentido arropado, querido, valorado, respetado por todos y cada uno de vosotros. Ojalá os pudiera llevar a todos conmigo allá donde vaya porque sois de las cosas más buenas que me ha dado el fútbol. Me enseñasteis muchas cosas pero con la que me quedo sin duda es que el equipo es lo primero y después vas tú", destaca.
Me llevo muchos amigos y por eso no está pagado con nada del mundo. Finalmente agradecer a todo el cuerpo técnico y su anexo Pequi que han confiado más en mí que yo mismo y si he dado ese paso hacia delante ha sido gracias a ellos. Me despido diciendo que me he dejado la vida por este club y que he disfrutado cada segundo de esta oportunidad. Espero que sólo sea un hasta pronto y nuestros caminos se vuelvan a cruzar", afirma esperanzado.
Algunos compañeros han respondido, pero hay que destacar las palabras de José Mari, que asegura que se le echará de menos en el vestuario.