El Cádiz CF sacó un valiosísimo empate de Huesca en un partido donde se puso perdiendo sin merecerlo. Cervera apostó de inicio por un plan de contención que le funcionó bien, pero no contaba con un gol encajado en una jugada muy mal defendida. Tuvo que ir con todo a por el empate y lo consiguió en el minuto 96 con un penalti marcado por Álex, el hombre de la sangre fría.
El Cádiz salió con un esquema desconocido en esta campaña. Sin bandas claras y con Bodiger en la mediapunta. El equipo presionaba arriba e intentaba complicar las cosas a un rival que estaba muy impreciso en el inicio. Cervera quería evitar que le llegaran balones a Mikel Rico y Mosquera y que conectaran con Rafa Mir y Ferreiro.
El conjunto amarillo quería salir a la contra, pero faltaba claridad en los toques rápidos para romper la vigilancia del rival. Lo hicieron Lozano, Álvaro Giménez y Bodiger a los 18 minutos, pero éste no acertó a rematar en una buena ocasión.
En la primera media hora el Huesca no llegó con excesivo peligro. El plan de Cervera de firmar un primer tiempo de aguante estaba dando resultado, pero el balón le duraba muy poco.
Con el paso de los minutos la situación se fue pareciendo a la que esperaba el técnico cadista, aunque sufrió el mazazo de tener que sacar del campo a Cala, lesionado. El Cádiz pisaba el área rival con peligro, aunque no se traducía en ocasiones claras.
En los últimos minutos del primer periodo el Huesca empezó a llegar por medio de Ferreiro, que obligó a Cifuentes a emplearse en un lanzamiento lejano. También Jurado demostró que está en un momento dulce con otro disparo con peligro antes del descanso.
El plan de contención había salido bien, pero había que esperar que con los cambios el equipo ganara recursos en ataque en la segunda parte. Tras el descanso todo estaba igual, en ese escenario de no pasar nada que tan tranquilo deja a Álvaro Cervera.
El partido entró en una fase anodina, sin un dominador claro y con muchas imprecisiones. Pudo el Cádiz adelantarse en una falta directa lanzada por Jurado en el minuto 56, pero el balón se estrelló en el larguero. Fue la chispa para que el partido se animara coincidiendo también con la entrada al campo de Okazaki.
El peligro del Cádiz lo firmaba Jurado cada vez que aparecía con un balón desde la banda izquierda. En el minuto 65 marcó el Huesca en una acción confusa en un centro largo que no acertó a despejar nadie con contundencia y Okazaki marcaba a puerta vacía. La jugada fue revisada y el tanto fue concedido.
Fue un gol perfectamente evitable por la pasividad de una defensa que no parecía la del Cádiz. Cervera, con un enfado monumental, daba entrada a Álex Fernández en un cambio que ya estaba preparado antes de la falta fatídica del gol.
Tras la pausa de hidratación le quedaba algo más de un cuarto de hora para buscar al menos el empate y ahora sí llevaba la iniciativa porque el Huesca le esperaba en su campo. De una tacada entraban Nano, Salvi y Pombo en el intento de no salir derrotado en un partido donde no había sido inferior al Huesca.
En el tramo final el equipo no era capaz de hacer daño a un rival bien plantado. Había mucha calidad sobre el césped, pero no llegaba con claridad. Pombo lo intentó desde el borde del área en el minuto 92, pero le salió muy centrado. El equipo tenía paciencia para cambiar el balón de banda y Salvi provocó un penalti claro que lanzó Álex y que transformó cuando el tiempo estaba ya casi cumplido.