Nadie lo sabía, menos aún lo imaginaban, pero el 29 de febrero de 2020 quedó grabado en la historia del Cádiz CF. Lo que aconteció después, con la llegada de la pandemia del coronavirus y todo lo que ello ocasionó, hizo de aquella fecha un día especial: la del último día que la afición cadista llenó las gradas del Ramón de Carranza y animó a su equipo en la victoria ante la UD Almería por 2-1.
Aquel día era un sábado bisiesto, con un duelo regional un día después del Día de Andalucía, de bocadillo en papel de aluminio para merendar y mucho arte en la 'Tacita'. La afición amarilla se disponía entonces a disfrutar de un partido más en Carranza, ante un rival directo en la lucha por el ascenso. Si los de Álvaro Cervera eran líderes con 52, el Almería de Guti llegaba al choque en tercer lugar, con apenas cinco puntos menos que el Cádiz.
Con un ambiente de gala en las gradas de Carranza, ambos equipos ofrecían espectáculo sobre el verde desde el primer minuto. Y tan solo 10' necesitó el Almería para, por medio de José Corpas, abrir la lata. Aunque la alegría le duró poco al conjunto indálico, ya que seis minutos después, un gol en propia puerta de Nikola Maras ponía las tablas en el marcador.
En la segunda parte, el Cádiz quería poner el broche a una tarde con muchos disfraces en las gradas y con atmósfera carnavalesca. Y así, a la hora de partido, llegó el premio con un centro de Salvi Sánchez, que acababa de entrar al terreno de juego, y un remate desde el suelo de Álex Fernández que se colaba en la meta rival.
Tras ganar al Almería, los cadistas empataron a domicilio con el CD Lugo. Un punto que permitió al equipo afrontar el parón por la crisis sanitaria ocasionada por la COVID como líder en solitario de la categoría de plata del fútbol español. En la reanudación, cuatro derrotas en 11 partidos permitieron a la SD Huesca arrebatarle el liderato al Cádiz en el último suspiro, pero nadie le privó del ansiado ascenso.