La derrota contra el Real Betis dejó tocada a la plantilla del Cádiz CF por producirse en los minutos finales, pero el buen ánimo no falta en el grupo. Álvaro Cervera ha desvelado por qué aparecía esta semana con una varita en los entrenamientos, algo que no se había producido con anterioridad.
"El día después del partidos les di una charla y les vine a decir que el fútbol tiene estas cosas de que pierdes en una jugada aislada. Insistí en que no teníamos una varita mágica, que sólo se podía trabajar en cada entrenamiento. Al día siguiente los jugadores pararon el entrenamiento y me regalaron una varita mágica y unas gafas de Harry Potter", explicó.
Es otra muestra más del buen ambiente que hay en una plantilla que sigue convencida de que se puede lograr la permanencia llevando a cabo el trabajo marcado por su entrenador.