El Cádiz CF se ha tenido que conformar con un empate en Girona en un partido en el que fue ganando hasta el minuto 98, justo el tiempo que había dado un De Burgos Bengoechea que volvió a demostrar su ineptitud. Muchos minutos de sufrimiento para, al final, perder dos puntos.
El conjunto gaditano salió al campo con descaro para buscar el área de Juan Carlos. En algunos momentos tenía que estar esperando por la posesión del Girona y en otros, salir con velocidad para sorprender a los locales. Sergio había apostado por una medular más poblada de lo habitual con la presencia de Álex Fernández.
El madrileño era el pegamento entre el centro del campo y la delantera. Se le veía ocupando diferentes espacios en el campo, ya que a veces parecía un segundo delantero y también ayudando en la salida del balón.
Uno de los objetivos era que no apareciera Riquelme, el jugador de más calidad de los locales. En el primer cuarto de hora no había tenido que intervenir Ledesma y ésa era una buena noticia. Sin embargo, las posesiones del Girona eran largas y muy cortas las del Cádiz cuando conseguía recuperar el balón.
El conjunto amarillo se fue desconectando del juego. No era capaz de dar tres pases seguidos y eso hacía que el peligro rondara el área amarilla con demasiada frecuencia. No sufría mucho, pero tampoco amenazaba y esa dinámica no era nada buena. Sus posesiones eran estériles, con mucho toque y escasa profundidad.
Pudo adelantarse en una acción en la que Sobrino se quedó solo delante de Juan Carlos tras una recuperación y un pase de Alcaraz, pero el delantero cadista remató con la izquierda y con una inocencia desesperante. El cancerbero del Girona no tuvo ningún problema para evitar el gol.
Había dejado muy mal sabor de boca esa oportunidad porque el buen trabajo defensivo no había tenido el premio esperado. Pero la suerte cambió en el mismo inicio de la segunda mitad, cuando un centro de Negredo acabó en gol de Álex Fernández, que llegó bien desde atrás con un remate en semifallo.
El Girona tenía que arriesgar y el Cádiz aprovechaba para hacer daño a la contra. Faltaba algo de acierto, como en un remate de Alejo tras un saque de banda de Luis Hernández o un centro de Sobrino sin rematador en una buena acción del manchego.
El Cádiz le ponía oficio y cortaba el juego con todas las fórmulas legales que estaban en su mano. Había conseguido contener al Girona y estaba ganando, pero quedaba una media hora y había que sufrir mucho para confirmar esa victoria momentánea. Se confirmó con un remate de Castellanos al larguero en el minuto 66.
El VAR anuló un gol en propia puerta de Cala en el minuto 74 por un agarrón previo de Castellanos. El central había salido para reforzar la defensa en un momento de acoso de los catalanes, con muchos centros laterales. Era una situación angustiosa porque quedaban demasiados minutos para fiarlo todo a la contención.
Salió Ocampo para inquietar a la contra y firmó una buena jugada a 10 minutos del final, pero su remate se marchó fuera. El reloj pasaba con mucha lentitud porque había mucho en juego y se podía perder el botín en cualquier acción aislada de los locales.
Por suerte, el Girona se precipitaba con tantos centrales y eso era bien contenido por la zaga amarilla. Pero eran ocho los minutos de prolongación y la victoria tenía que ser muy sufrida. Y cuando el tiempo ya estaba cumplido, el nefasto árbitro vizcaíno pitó un penalti que transformó Stuani.
Que estos tios sigan arbitrando es para hacerselo mirar,ua no sr sabe quoe es más incopetente el arbotro o el que lo designa para que arbitre,desproposito total de todo el estamemto arbitral y como siempre no pasará nada seguirán diciendo el siga,siga que no hay nada
El partido lo ha perdido Sergio cuando pasa a defensa de 5 sacando a Cala, que nada más salir ya se metió un gol en propia meta. A partir de ese momento no había medio campo y solo se dedicaron a dar pelotazos sin ton ni son. Si tienes que refrescar la media porque ya está agotada y sacas a José Mari por qué no pones también a un jugador como Blanco que ha demostrado en el Madrid que es un buen medio centro. Me parece que con este entrenador, tan "amarrategui" como Cervera, juega a no perder y tiene igualmente sus favoritos en el equipo que siempre van a jugar aunque no consigan resultados.