La llegada de Lucas Pérez con el Cádiz CF a Chapín estuvo marcada por el saludo a un jugador del Xerez. Se veía que había una amistad, no era el simple cumplido hacia un compañero de profesión. Era Migue García, con quien coincidió en el filial del Rayo Vallecano, donde ya el gallegó demostraba que iba a llegar muy lejos.
"Fuimos compañeros de piso, hacía años que no nos veíamos. Sigue siendo la misma persona de siempre. Hemos mantenido el contacto, pero cada uno ha hecho su camino. Lucas ha tenido una carrera exitosa, pero sigue siendo igual que siempre", explica Migue García.
"Entonces yo tenía 19 años y él 20. Era el filial del Rayo, quedamos campeones y subimos a Segunda B. Era un equipo que tenía ha gente que después ha jugado como Borja García, del Girona, o Alejandro Arribas, que está en México ahora", recuerda el xerecista.
Desconoce los planes de Lucas Pérez en un futuro inmediato, pero sabe que seguirá dando guerra. "En aquel momento Lucas era el mejor del equipo, hizo 20 goles. Y sigue siendo muy bueno, se está viendo en el Cádiz".