El partido del Cádiz CF contra el Almería evidenció que el equipo necesita refuerzos. Fue capaz de sacar un punto en una actuación muy mala en la segunda parte y casi saca dos más en el tramo final, pero es palpable la necesidad de apuntalar la plantilla con algún refuerzo. El club está en ello con la mayor cautela posible, rota de algún modo por las peticiones de Sergio González tras el choque.
"No me gusta desvelar la situación. Vamos a movernos y tenemos que apretar al presi porque todos los equipos se van a reforzar y tenemos que ser lo mismo o mejores que ellos", dijo el técnico.
El tono usado por el entrenador no es de exigencia, pero sí desliza la preocupación que puede sentir para contar con más efectivos de cara a la segunda vuelta. Además, no se centra sólo en la llegada de un delantero: "La delantera puede ser una posición, las bandas puede ser una posición, los centrales tal y como estamos... Vamos a ver el músculo que tenemos y vamos a elegir situaciones".
En la marcha de Lucas Pérez poco o nada puede hacer ya el Cádiz después de haber intentado convencerlo para quedarse por activa y por pasiva. "Como entrenador no quiero que pueda irse, pero tiene esa sensación de su Depor. Es una opción que está abierta y sería una pérdida importante porque es un futbolista diferencial".