Una de las anécdotas del partido se vivió en el primer tiempo. En la acción de la expulsión de Djené, el árbitro De Burgos Bengoetxea fue llamado por el VAR para que viera una acción en la que el jugador del Getafe había agredido a Javi Hernández en el área del conjunto local.
El colegiado se dirigió al monitor y en ese momento llamó a los dos entrenadores para explicarles las acción. Les dijo que iba a expulsar a Djené por ver la segunda amarilla por ese golpe sobre el jugador cadista. Consideró que no era merecedor de roja directa, pero sí de una amonestación que le costaba dejar el partido.
En la improvisada charla con Sergio González y Bordalás les aclaró que no era penalti porque la acción se había producido en un momento en el que el balón no estaba en juego.
Sergio González agradeció el gesto del árbitro y dijo que "hay que agradecer esto porque así nos queda claro lo que señala". No se sabe si será algo que se repita en más partidos o algo excepcional.