Mucho se ha hablado sobre la aportación de los fichajes de enero del Cádiz. Desde el club se ha pedido paciencia y se ha hecho hincapié en que no por ser desconocidos no podían ser útiles para el equipo. En el choque ante el Atlético se ha visto algo de eso. Queda mucho por demostrar, por supuesto, pero es un buen inicio.
Extrañaba hasta el momento que Mauricio Pellegrino sólo le diera minutos a Juanmi, que con tres goles ya está demostrando que es uno de los mejores fichajes de enero de toda la categoría. Ha habido que esperar hasta este sábado para verlos a los tres interviniendo en un mismo partido.
De Juanmi no hay mucho que decir. En los partidos en los que no ha marcado también ha demostrado que es un jugador de primer nivel. Y ahora que está viendo puerta con facilidad ya se puede considerar un refuerzo de lujo.
Había ganas de ver a Ousou y no ha decepcionado. El sueco se ha mostrado como un central rápido y expeditivo, que ha ganado la partida a Morata en más de una ocasión. Sorprende que Pellegrino no le haya dado la oportunidad antes porque se ha visto que tiene oficio y que puede ser importante para el equipo.
Samassekou todavía no ha sido titular, pero cada vez que entra ofrece detalles muy interesantes. Ya lo hizo en Pamplona y ahora vuelve a repetirlo. Criterio para la circulación y despliegue físico en la medular. El trabajo del club requería de algo de paciencia y ahora se empieza a ver que merecía la pena esperar. Es verdad que eran dos incógnitas las de Samassekou y Ousou, pero a buen seguro que ciertas críticas han sido bastante precipitadas.
Paciencia se puede tener en verano, en verano te puedes arriesgar a traer algún jugador que necesite un periodo de adaptación; pero si en el mercado de invierno, encima de que esperas al último día, te traes a jugadores que hasta marzo no empiezan a jugar y la liga acaba en mayo... pues la cosa se pone dramática, sobre todo si tus rivales llevan desde enero jugando con sus refuerzos de invierno.