Mauricio Pellegrino no cambia el rictus ni cuando gana ni cuando pierde. El argentino se muestra siempre comedido en sus declaraciones, sin dar esos titulares que otros técnicos regalan constantemente. Lo suyo es el trabajo oscuro y que, por el momento, mantiene vivo al Cádiz a falta de ocho jornadas.
El entrenador saca conclusiones positivas de este resultado, como no podía ser de otra manera. "Importante esta victoria, sin duda. Esto redondea la actuación que ha sido muy buena. Estamos muy contentos. El equipo va creciendo y teniendo la sensación de que puede ganar partidos. Vamos madurando jornada tras jornada", dice.
Sobre el desarrollo del partido dijo que "los cambios nos han dado mucho y eso es muy importante para el equipo". Las lesiones de Fali y Kouamé fueron lo peor de una noche muy bonita, pero el técnico es cauteloso: "Tenemos un par de semanas. Kouamé fue el abductor y Fali el cuadríceps. Vamos a esperar a los informes médicos".