La situación deportiva del Cádiz invita a pensar en que el mes de enero debería de ser movimientos para reconducir una temporada aciaga. En las últimas campañas, el club ha acudido al mercado invernal para inyectar de potencial a la plantilla, pero en este momento no será nada fácil porque las fichas están ocupadas e incluso hay jugadores que aspiran a encontrar un hueco, como Luis Hernández.
La mayoría de los futbolistas de la plantilla tienen contrato en vigor y no parece sencillo que muchos de ellos tengan la intención de cambiar de aires, por lo que no se pueden esperar excesivos cambios en un plantel que, por el momento, está muy lejos de ofrecer el rendimiento esperado.
Un jugador que tiene opciones de salir en enero es Tomás Alarcón. El centrocampista chileno queda libre el próximo 30 de junio de 2025, al final de la presente temporada, y hasta ahora su presencia en el equipo está siendo testimonial. No hay movimientos para su renovación y tiene mercado para poder encontrar destino.
Su nombre está sonando en los últimos días como un posible refuerzo para la Universidad Católica y en las últimas temporadas no le han faltado equipos. Ha estado cedido en el Zaragoza y en el Cartagena, con un buen rendimiento en este último. En esta campaña se esperaba que pudiera tener protagonismo en el Cádiz, pero las lesiones han cortado su progresión.
Manuel Vizcaíno, presidente del Cádiz, reconoció a mediados de septiembre que había un exceso de jugadores en la plantilla y que podría haber salidas en enero: "A la plantilla le sobran tres o cuatro jugadores. Eso habrá que arreglarlo en el mercado de invierno porque no se puede tener una práctica de 28, 29 jugadores, eso no es normal. No pretendíamos eso, pero las circunstancias nos han hecho que vayamos a eso para empezar el campeonato, para tener solvencia, para que no haya dudas. Habrá que retocar eso porque no es viable desde el punto de vista numérico, ni desde el punto de vista económico, aunque tú tengas límites, después tienes un presupuesto que cumplir y nosotros no podemos vivir por encima de nuestras posibilidades", dijo.