Carlos Mateos Gil
Leganés (Madrid), 12 dic .- El argentino Ezequiel Muñoz (Pergamino, 1990) se encuentra peleando con una pubalgia, lesión que en el mundo del fútbol se considera muy dura. Eso le ha impedido disfrutar en el campo del buen momento del Leganés aunque le gusta lo que ve.
A su vuelta le espera una defensa con tres centrales en la que se siente cómodo pero donde ya no está su amigo y compatriota Martín Mantovani, que en verano salió del club. De todo ello habló en exclusiva para EFE.
Pregunta: Se les ve mejor cara. ¿Cómo de importante ha sido salir del descenso aunque estén a principio de temporada?
Respuesta: Demasiado importante. Una cosa es ver la tabla y estar ahí abajo y otra es cómo estamos ahora. Sabemos que no nos podemos relajar ningún momento porque los equipos están muy cerca. Pienso que estamos en el camino justo, el equipo ha mejorado mucho y se nota en los resultados
P: ¿Le sorprende ver el nivel de los equipos que hay con ustedes en la zona baja? A priori los rivales que iban a estar ahí eran otros.
R: Este año es medio raro porque equipos como el Alavés están haciendo una gran temporada, el Sevilla está peleando, el Real Madrid está un poco más abajo... Si todos están en Primera quiere decir que tienen el nivel para competir y nosotros tenemos que pensar en nosotros nada más, en mejorar día a día con el entrenador. Y esperar que vayan saliendo los partidos para ir jugando, ir compitiendo e ir sacando resultados
P: A los que seguimos el equipo desde fuera nos da la sensación de que Mauricio Pellegrino siempre ha confiado en que iban a salir adelante incluso cuando estaban peor. ¿Cómo es de entrenador?
R: Es muy buen entrenador. Intenta transmitir tranquilidad a los jugadores, cosas sencillas. Para mi jugar sencillo es lo que hace la diferencia en un equipo. Explica de una manera que todos le entendemos y cuando todo el equipo lo entiende y sabe a lo que jugamos es más fácil que lleguen los resultados. A pesar de los malos resultados que estábamos sacando al principio, de que estábamos muy atrás, él siempre fue positivo y dijo que creía en el equipo. Eso para nosotros es importantísimo.
P: ¿Hay mucha diferencia entre un técnico que ha estado como futbolista en clubes como el Barcelona o el Valencia y otro como Asier Garitano que nunca llegó a ese nivel?
R: No creo mucho en eso, en que eres mejor como entrenador si hiciste buena carrera como jugador. Hay entrenadores que han jugado en categorías menores y son grandísimos. Asier Garitano a mi me demostró también que es un entrenador demasiado capacitado, nos llevó a las semifinales de la Copa del Rey y nos salvó con muchos partidos de anticipo. Se ve que está también muy preparado.
P: La buena racha la ha vivido desde fuera, batallando con una pubalgia. Dicen que es una de las lesiones más traicioneras que hay. ¿Por qué?
R: Yo hice mucho tiempo trabajo conservador, entrenando con el equipo pero siempre con dolor. El técnico no me tenía en cuenta porque no estaba al cien por cien. Decidí esperar un mes y medio entrenando aparte, haciendo gimnasio y no me dio eficacia. Al final me sometí al cirujano. Pienso que es una de las lesiones más feas porque te impide hacer una de las cosas más lindas en el fútbol que es darle a la pelota.
P: ¿El gran problema entonces es el tiempo que pasa entre que uno decide operarse o no?
R: Exactamente. Si me hubiese operado apenas la tuve, en agosto cuando empecé con los dolores, ya estaría jugando. Pero al fin y al cabo la cirugía es el último remedio por el que uno tiene que optar. He hecho todo lo posible para no llegar al quirófano pero al fin y al cabo no he tenido suerte.
P: Cuando usted dejó de jugar el equipo formaba con defensa de cuatro. Ahora hay defensa con tres centrales. ¿Le preocupa tener que adaptarse a la nueva realidad cuando vuelva?
R: Sinceramente no porque a mi se me da más la defensa de tres. Entre Génova y Palermo he jugado casi cinco años con defensa de tres. Más ganas de jugar me vienen cuando la veo. Para pasar de cuatro a tres el mecanismo del equipo tiene que estar bien aceitado, bien hecho. Pienso que al equipo hoy en día le está dando resultados y hay que seguir por el mismo camino. No veo la hora de volver y poder ayudar al equipo.
P: ¿Echa de menos a Martín Mantovani?
R: Como amigo sí y como capitán también. A mi me dio mucho. Es un jugador siempre positivo, tiene un carisma increíble. Más allá de lo que hacía en la cancha me falta porque la verdad es que es un amigo para mi.
P: Son muchos sudamericanos en el equipo. ¿Lo agradece?
R: Sí. Pero en este equipo es la primera vez que encuentro un grupo tan sano independientemente de dónde vengan los jugadores. Todos tiramos para el mismo lado, es un grupo fantástico y todos apuntamos hacia el mismo objetivo.