En el encuentro que disputó el Celta contra el Barcelona en el Camp Nou, Sergi Gómez se produjo una luxación escapulohumeral anterior en su hombro derecho. Una lesión que le hizo estar un tiempo de baja y que no es la primera vez que la sufre.
Esta reiteración hace que se vea obligado, tarde o temprano, a pasar por el quirófano, una decisión que el central catalán ha querido retrasar. Considera que no es el momento adecuado de dejar al equipo con un defensor menos durante dos meses y, por ello, se prepara para competir con dolor y con precaución.
"Estoy reforzando. Está claro que hay una lesión, pero mientras pueda aguantar con una buena prevención, pues aguantaremos", ha indicado Sergi Gómez este martes en rueda de prensa, donde también ha explicado lo de la operación:
"Es un hombro que cuando has tenido varias luxaciones, hay que operarlo, pero ahora pienso que no es adecuado estar dos meses de baja. Entonces, cuando encuentre el momento para hacerlo, lo voy a hacer. Hay una lesión, no es agradable, pero mientras se pueda aguantar así, mucho mejor".