Vuelve a brillar el sol para el jugador del filial del Celta Alberto Solís. Tras una prolongada lesión en su ligamento cruzado, el joven ya cuenta con el alta médica y está cargada de ganas de que arranque la próxima temporada. De momento, se marcha de vacaciones con una sonrisa de oreja a oreja.
Han sido siete largos meses de sufrimiento pero ya se ve la luz al final del túnel. El jugador del Celta B Alberto Solís ya cuenta con el alta médica, después de sufrir el pasado mes de octubre una rotura de ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha, una lesión que cortó su progresión.
Pero lo peor ya pasó y Solís se encuentra ahora con las pilas cargadas de cara a la próxima temporada. Ahora es momento de descansar y agradecer, como hizo el propio jugador a través de su cuenta personal de Twitter.
"Después de muchos meses de trabajo, por fin puedo decir que tengo el alta médica. Toca disfrutar de las vacaciones y llegar en la mejor forma posible a la pretemporada. Muy agradecido a todas las personas que han estado a mi lado en este proceso de recuperación", dijo el jugador en su mensaje.
Alberto Solís fue uno de los jugadores más destacados del Juvenil de División de Honor. Esto hizo que el club decidiese incorporarlo al Celta B este pasado verano, donde se hizo con un puesto de titular hasta su lesión. En total, el mediocentro, disputó nueve encuentros con 765 minutos de juego.